Informativo virtual
para integrar la familia naval colombiana
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Nº 168
01/2015
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Unidos por el mar
y exhaustos por el
último poste
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El 5 de enero de 2001, es decir hace 14 años, se editó y envió a los contis del "glorioso 38", por primera vez “LA CORREDERA DEL 38”, como un medio para organizar un homenaje a nuestro compañero Almirante Mauricio Soto G. Desde entonces, nos hemos entusiasmado con este oficio que ha ocasionado, desde afanes periodísticos, hasta angustias laborales y familiares, por el tiempo que absorbe y la dedicación que requiere cada número.
Sin embargo son muchas las satisfacciones que sentimos cuando desde apartados rincones del país y del mundo, los contis leen los reportajes virtuales que muestran la faceta humana de los marinos de Colombia; los escritos, las anécdotas, el espléndido e interesante trabajo sobre acontecimientos y crónicas, las imágenes sobre los eventos sociales y deportivos, las añoranzas, las veleidades, los recuerdos, las memorias marineras, las notas alentadoras y de solidaridad, los mensajes, los apuntes, los textos y pataleos, las prosas sentimentales y marineras, la mística, los refritos, los alegatos chicaneros y demás colaboraciones de los Cyber-correderos, que escriben para entretener, recordar y deleitar a los suscriptores, que han venido aumentando significativamente.
Pero el resultado más importante que se ha logrado es el de integrar a la Familia Naval. Muchos compañeros que por distintas razones estaban apartados y distantes, hoy disponen de este informativo virtual para reencontrarse y comunicarse de manera grata y regular. Es así como desde mayo del 2003, cuando “LA CORREDERA DEL 38” se rebautizó “CYBER-CORREDERA”, tenemos noticia de lo que ocurre en el entorno de nuestra gran familia naval, a la cual pertenecimos (unos por poco y otros por mucho tiempo). Estamos despertando el deseo de transmitir la tradición a la generación siguiente, añadiendo nuestro aporte, nuestros recuerdos y nuestras vivencias. De ahí el colectivo deseo de comenzar la retrospectiva de nuestra propia historia, para facilitar a los marinos del mañana y a nuestros propios hijos, conocer los actos de aquellos que les precedieron en la vida soñando con el mar y amando la Patria.
Con el reportaje virtual que presentamos en este número, damos comienzo a una nueva sección, la cual continuaremos de manera permanente, para que los contis relaten a través de sus recuerdos, experiencias y anécdotas su vida en la Armada y en la vida civil. Esto significa que desde esta Cyber-corredera cada número incluirá un reportaje. Con esto se pretende mostrar la parte humana, graciosa y picante de aquellos momentos inolvidables, tan seductores de leer y placenteros de recordar por sus protagonistas.
Con el tiempo los escritos aquí publicados, aunque de momento puedan parecer frívolos, tirados de los cabellos o ladrilludos, serán recordados por los cientos de pensamientos y fragmentos autobiográficos que revelan instantes de una o varias épocas de nuestra gloriosa y querida Armada Nacional. Cada colaboración debe paladearse por el sabor, forma y consistencia propia de quien la escribe y aporta, haciendo un esfuerzo de memoria para contar las cosas que hace muchos años sucedieron, manteniendo un dialogo interminable, entre el presente que es individual y aislado con el pasado que es común y a todos nos une, como el “último poste”.
Es satisfactorio y halagador que esta quijotesca labor, a la cual dedicamos muchas horas de trabajo al mes, con cariño, dedicación y desinterés, siga siendo acogida con entusiasmo y despierte entre todos los miembros de la gran Familia Naval sentimientos de fraternidad, afecto, compañerismo y fervor. “CYBER-CORREDERA” sigue creciendo en Cyber-suscriptores, pero también ha mejorado en presentación, calidad y servicios (suplementos especiales, avisos funerarios, eventos oficiales, Etc.).
Gracias a quienes colaboran con sus escritos y memorias. Gracias a los que envían sus mensajes de apoyo y felicitación. Gracias a todos los que la esperan y la reciben con simpatía y aprecio. Gracias a los que protestan por no recibirla, a los críticos y a los interesados en preservarla y mejorarla.
Sigamos todos “unidos por el mar y exhaustos por el último poste”
Jorge Serpa Erazo/ 38-082 (Enfermero Pinto), TN Francisco Rodríguez Aguilera / 74-065 (Editor) y
CRIM José Ramón Calderón / 38-004 (Corresponsal en Cartagena)
¿Señor Almirante Guillermo Uribe Peláez, cuéntenos cómo fueron sus primeros años, su niñez, adolescencia y vida familiar?
Todo fue normal, rodeado por el cariño de mis padres y haciendo travesuras como todos los niños. La mayoría de los ratos libres los dedicaba a nadar en la piscina con mi primo y mejor amigo Álvaro Peláez Ochoa.
¿Cuál su primer contacto con la Armada Nacional?
Yo quería ser aviador, pero terminado el 4 año de bachillerato, llegó a Medellín el TF Oscar Herrera Rebolledo, quien habló en los colegios de la aviación naval, de los cursos en los Estados Unidos, etc. Con mi mejor amigo nos presentamos, pensando ser marinos y pilotos. Ambos pasamos, pero mi primo tuvo un inconveniente personal y no pudo acompañarme a la Escuela Naval.
Lo de la aviación naval era pura fantasía en esa época. Pero no me ha pesado un solo día haberme vinculado a la Armada Nacional.
¿Cómo fue su ingreso a la Escuela Naval de Cadetes que entonces estaba en Bocagrande?
Nosotros los antioqueños nos embarcamos en Puerto Berrio e hicimos el viaje a Barranquilla, desafortunadamente encallamos cuando íbamos a atracar como a las 16:00 horas, en Barranquilla. En el buque no nos dieron comida, ni desayuno, pues no estábamos programados para esas comidas. En Luruaco, en nuestro viaje por tierra hacia Cartagena pudimos saciar el hambre. Entramos por la Puerta del Reloj, entonces no existía la avenida Blas de Lezo y vimos por primera vez el mar cuando salimos por la entrada de la muralla, cerca al actual Museo Naval.
¿Qué sintió el primer día de recluta?
Sentí hambre física, pues en el comedor no tenían cubiertos para todos los cadetes y debíamos comer en dos turnos y a mí me correspondió el segundo turno.
¿Qué podría decir de los Brigadieres, Guardiamarinas y superiores en la ENC?
El Capellán de la Escuela, era santandereano, desafortunadamente no recuerdo su nombre, quien hizo que en nuestro curso no nos salaran; pero todas las noches debíamos someternos para que toda la Escuela nos diera chancleta y zueco de madera. Como los Brigadieres estaban en USA en busca de la Fragata Almirante Padilla, nos asignaron como Brigadieres a los cadetes de penúltimo año, que sí eran caníbales en todo el sentido de la palabra. Especialmente el Brigadier Mayor a quien sus compañeros llamaban “Gato Martínez”, quien murió lamentablemente a causa de un tifo, en ejercicio de sus funciones.
¿Cuál es la anécdota que más tiene presente de la ENC?
Estando en Sevilla- España, nos dio un mal de estómago, tanto a los Cadetes como a toda la tripulación del Buque. Cuando uno llegaba donde el médico, que era el Capitán Ariel Díaz, y le solicitaba un remedio para el mal, su respuesta era que estaba igual y que si se conseguía remedio para ese problema de salud, se lo enviara a él. Un día yo iba rápidamente para el Buque y me encontré una belleza de mujer, le eché un piropo y me paró bolas, pero tuve que continuar mi camino hacia el Buque y dejar esa belleza. Después de satisfecha mi necesidad volví al sitio donde la había encontrado y ya no estaba. Me fue imposible volverla a encontrar.
¿A quién recuerda de sus compañeros’?
Los recuerdo a todos. De nuestro curso han muerto 8 y quedamos 4 vivos. Mi mejor amigo fue siempre Hernando Salas “el Brujo”.
¿Cuál era su vianda más apetecida del menú naval de entonces?
Definitivamente el PETO.
¿En qué materia le fue mejor?
En realidad fui bueno en matemáticas y me gané el premio en operaciones.
¿Qué profesor dejo en usted la huella más grata?
En especial nombraré dos: Álvaro Rueda y el “Conejo” Avella, aunque la mayoría de los profesores eran excelentes.
¿A qué oficial admiró más de cadete?
De cadete al que más admiré fue al Capitán de Corbeta Jorge Pardo Montero, Director de la Escuela Naval.
¿Qué hizo el primer día de franquicia?
Ir al mejor restaurante de ese tiempo que se llamaba “El Mesón del Escribano” que quedaba en el Parque Bolívar y, de ahí, a conocer la ciudad.
¿Cuantas novias tuvo de cadete?
Cuando vine de cadete a Cartagena tenía una novia en Medellín, pero cuando llegué de vacaciones, al término del primer año, me había reemplazado. De cadete tuve dos novias cartageneras una de ella es mi esposa Nancy Martínez.
¿Cómo cadete antiguo se consideró caníbal o madre?
Definitivamente madre
¿De los embarques cuál y qué recuerda con nostalgia?
De Cadete cada año teníamos un crucero en la Fragata Almirante Padilla. Considero el mejor el de 1948 a España, con escala en Puerto Rico, Madeira, Sevilla, Marruecos, Canarias y Puerto Rico.
¿Formó parte de la banda de guerra?
En mi época no había banda de guerra. Pero si la hubiera habido, habría formado parte de ella, pues fui de la banda de guerra de mi colegio.
¿Qué podría decir de sus brigadieres, guardiamarinas y superiores en la ENC?
Los mejores Brigadieres sin lugar a dudas para nosotros los cadetes eran Jairo Mantilla Gómez y el Brigadier Durán alias “Platanito”, quienes nos citaban a relación y estaban pendientes antes que nos presentáramos, para cambiarla por una hora de trote o plantón, y ellos no perder la siesta.
Como oficiales recuerdo a uno de los de la Sección, el Mayor IM Cediel, que nos protegía de los cadetes más antiguos. Al Capitán Carlos Prieto Silva, graduado en Chile que instituyó la “Lista de Honor”, en la cual se podía entrar con promedio superior a cuatro o estar en cualquiera de los equipos de deportes que representaban la Escuela Naval. En castigos colectivos, los de la lista, salíamos y no teníamos que pagarlos y en castigos individuales, se pagaba la mitad.
¿Después de tantos años qué añora de esa época?
Sin lugar a dudas la época de Brigadier, ya que en ese tiempo era la mejor, pues el Brigadier Mayor era quien manejaba la compañía de Cadetes y como tal, no les hice nada de lo que me molestó cuando fui Cadete.
¿Por favor una síntesis de su vida como Oficial Naval?
Al graduarme en la Escuela Naval fui asignado al buque tanque Blas de Lezo, cuyo Comandante había sido nuestro profesor de navegación y rajó a tres de nuestros compañeros, y a quienes reclamamos para ayudarlos, nos hicieron perder puesto en la promoción, pero me fue bien con él.
Después fui profesor en la Escuela Naval y Oficial de Sección de la Compañía de Cadetes. Posteriormente fui a estudiar electrónica en USA y al regresar, fundador del Taller de Electrónica del Astillero Naval. Fui traslado al “ARC 20 de Julio” como Oficial Electrónico, pero a los ocho días trasladaron al Comandante y quedé como Jefe del Dpto. de Operaciones. Ocho días después, trasladaron al Segundo Comandante y quedé como Segundo Comandante. Después fui trasladado a la Fuerza Naval del Sur, como Jefe de Estado Mayor. El Comandante de la Base solicitó el retiro y yo quedé con los dos cargos.
Después fui nombrado Director de Comunicaciones del Comando de la Armada. Estando en ese cargo fui llamado a realizar los cursos de Estado Mayor y de ascenso a Capitán de Fragata, en la Escuela Superior de Guerra. Al término del curso fui nombrado Comandante del “ARC Mamonal”. Después fui nombrado Comandante del “ARC Antioquía”, luego del “APD Almirante Padilla” para entrenar la tripulación que iba a recibir la del “APD Almirante Tono”, del cual yo iba a ser su Comandante. Posteriormente fui nombrado Jefe del estado Mayor de la Fuerza Mayor del Atlántico, luego fui designado Comandante de la misma Fuerza. Posteriormente, Comandante de la Base Naval ARC Bolívar.
Seguidamente fui Subdirector de la Escuela Naval, Comandante del “ARC Gloria” y nuevamente Subdirector de la Escuela Naval. Luego Jefe del Estado Mayor Naval del Comando de la Armada.
Al término de los cursos de Altos Estudios Militares, fui nombrado Director de la Escuela Naval Almirante Padilla. En este cargo, logré en el primer año, que se aprobaran los programas de Administración Marítima y Oceanografía. La primera fue fundada por mi cuando era subdirector de la Escuela Naval, con la aquiescencia del Director Almirante Benjamín Álzate. En el segundo, logré que la Escuela Naval fuera aprobada como Universidad, pero no pude recibir del Ministerio de Educación el Decreto que la reconocía como tal, porque fui trasladado como Comandante de la Fuerza Naval del Atlántico. Lo recibió mi gran amigo el Almirante Hernando Salas Ramírez.
Posteriormente fui nombrado como Subdirector de la Escuela Superior de Guerra, Inspector de la Armada, Inspector de las Fuerzas Militares y luego Segundo Comandante de la Armada, cargo en el cual me retiré.
¿Cuál fue su mejor Buque?
Indiscutiblemente el “ARC Gloria”
¿Cuéntenos su momento más difícil?
Cuando estábamos en Boston, recibiendo el “APD Almirante Tono”, teníamos programado el zarpe y nos lo hicieron aplazar porque subía un huracán pegado a la costa este de los Estados Unidos. Al día siguiente cambio de rumbo el huracán se abrió hacia el Mar y nos permitieron salir de Boston. Íbamos hacia Norfolk, pero el huracán volvió y cambio de rumbo pegado a la Costa. Sí regresábamos a Boston o entrábamos a Nueva York, nos cogía. Entonces decidí seguir hacia Norfolk. Nos cogió a las 11 de la mañana, era como si estuviéramos en la noche más oscura. Al fin, a las 10 de la noche, nos dejó y como se dice coloquialmente, “después de la tempestad viene la calma”, porque el mar quedo como un espejo y pudimos entrar a Norfolk como a la una de la mañana.
¿En la hora presente, como uno de los Almirantes más admirados y estimados de la Armada Nacional, su mayor reto?
A estas alturas de la vida ya los retos son pocos. Me tracé el reto de hacer la Sede de Acore Bolívar y creo que tenemos la mejor sede del País y la hemos dotado muy bien. Mi reto ahora es conseguir los dineros para la Galería Naval del Museo Naval, de cuyo comité soy Presidente.
¿Sus logros en Acore Bolívar- como Director?
Yo creo que el logro más importante fue conseguir en el Hospital Naval un lugar y que el Comando de la Fuerza, me autorizara un suboficial que gestionara las citas, porque en esa época, la demora para conseguir la cita era toda una mañana o una tarde, y también reclamar las medicinas que recetan. Posteriormente Chepe Calderón gestionó que la Infantería de Marina nos asignara un Infante para que ayudara al suboficial. Varias damas me agradecieron este logro hace ya 14 años.
¿Cuál es su opinión sobre Cyber- Corredera y los servicios que presta a la familia Naval?
Yo creo que ha contribuido de manera importante a la unión de la Familia Naval, pues allí se cuentan todas las actividades, tanto de los que están en servicio activo como de los retirados, y se comentan los eventos sociales que hacen nuestras familias. Además nuestros hijos tienen cupo en Cyber-Corredera.
¿Le gusta el Pañol de la Historia?
Sí, creo que es un buen mensajero para conocer nuestra historia naval. Es más, en algunas ocasiones hemos transcrito, en una sección de nuestro boletín mensual de Acore Bolívar, en la parte de Algo sobre Historia.
¿Qué debemos mejorar?
Creo que está muy bien pero le sugiero que hagan una producción mensual.
¿Por favor un mensaje para enviar a la Familia Naval?
Yo creo que la Armada es la mejor Mamá y que como familia debemos estar unidos alrededor de ella, para defenderla de cualquier ataque y apoyar al Comandante de la Armada.
Por: Capitán de Navío Ricardo García Bernal
Es de conocimiento general que la II Guerra Mundial causó millones de muertos, civiles y militares, en tierra, mar y aire, especialmente en Rusia y Alemania. Pero no todo el mundo sabe que hubo una serie de tragedias marítimas que por diversas razones no recibieron el debido reconocimiento en los medios de comunicación, y se pueden considerar crímenes de guerra impunes.
Este artículo está destinado a sacar a la luz para la Armada Colombiana, los casos de varios antiguos transatlánticos alemanes, hundidos en diferentes episodios pero en la misma región geográfica, y fueron similares en la carga de pasajeros: militares en retirada, refugiados civiles, ex prisioneros de campos de concentración, en su mayoría alemanes pero también de otras nacionalidades.
El escritor alemán Günter Grass (premio Nobel de Literatura 1999) describe en su novela histórica “A paso de Cangrejo” los antecedentes y el desarrollo del hundimiento de un buque, a través de la historia de una familia alemana de la clase obrera cuya madre, embarazada, se vio obligada a embarcarse en uno de estos transatlánticos para su corto pero trágico viaje, pero tuvo la suerte de ser uno de los pocos sobrevivientes, y además, dio a luz un hijo casi en el momento de su rescate por el torpedero “Löwe”.
Además de lo incluido en el libro de Günter Grass, y la bibliografía reseñada, para la elaboración de este artículo se ha debido recurrir a varias páginas de la enciclopedia Wikipedia.
En marzo de 1938 fue entregado al gobierno alemán, un transatlántico construido, en los astillero de Blohm & Voss, destinado a operar para el programa “Fuerza por la Alegría”, actividad del gobierno nazi, que buscaba, por medio de viajes en buques de pasajeros, viajes por el interior de Alemania y otros programas de bienestar, estimular el buen comportamiento de miembros la clase obrera alemana, y su adhesión al gobierno nazi.
Como buque de pasajeros que era, tenía un diseño moderno y sobrio, tenía 8 cubiertas; una piscina climatizada, grandes cocinas, comedores, gimnasios etc. Como una muestra de la supuesta igualdad en la sociedad alemana de la época, todos los camarotes eran iguales. Tenía 208 metros de eslora y 7 metros de calado, su tonelaje de registro bruto era de 25,484 toneladas, podía recibir 1,463 pasajeros, y su tripulación era de 417 miembros .
Este buque se habría de bautizar como “Adolf Hitler”, pero en una decisión con un claro sentido político, éste dispuso que se bautizara con el nombre de un funcionario nazi de tercer orden, llamado Wilhelm Gustloff, a raíz de su reciente asesinato por un estudiante judío, en Suiza. El principal mérito de éste funcionario, era su devoción fanática por la causa nazi. Entre otras cosas se le atribuía una afirmación: “Las personas que más quiero en el mundo son mi mujer y mi madre, si mi Führer me ordenara matarlas, lo obedecería”
Su viaje inaugural fue el 21 de abril de 1938, y su primera misión como transporte militar, la repatriación desde España de la Legión Cóndor, enviada para colaborar con las fuerzas franquistas en la Guerra Civil española. (1936 -1939). Operó llevando pasajeros por el mar Báltico hasta mayo de 1939. Hasta ahí llegó su historia como crucero de pasajeros.
En agosto de 1939 fue transformado en buque hospital (Lazarettschiff) y destinado al puerto de Danzig hasta mayo de 1940, el 1° de octubre es requisado por la Kriegsmarine para ténder de submarinos, pero fue usado de nuevo como buque hospital, durante la invasión alemana a Noruega. Entre 1940 y 1943 sirvió como buque de alojamiento para tripulaciones de submarinistas, y cuartel para la Armada y fue asignado al puerto de Gothenhafen. Fue pintado de gris, y artillado con 3 piezas de 105 mm. y 8 ametralladoras de 20 mm. Ya no era un buque hospital.
En enero de 1945, con un duro invierno, la situación era muy grave para Alemania; con el avance soviético, miles de ex prisioneros y ciudadanos alemanes huían hacia el occidente. El Almirante Dönitz ordena la Operación Anibal, para evacuar a civiles y militares alemanes, y a fugitivos de los campos de concentración. Se reunieron con cientos de alemanes quienes convergían en los puertos de Danzing y Pillau; unos 7 millones de fugitivos huían desde la Prusia Oriental por el corredor polaco hacía el oeste de Alemania.
Desde el 21 de enero de 1945, el Wilhelm Gustloff fue uno de los buques asignados a la evacuación de personas hacia los puertos del occidente, operación en la que participaron buques mayores como los cruceros pesados Deutschland y Scheer, varios transatlánticos, y cientos de embarcaciones menores.
El 21 de enero el Gustloff estaba en Danzig, habiendo embarcado, según la cifra oficial, más de 8,956 personas, incluyendo a 375 alumnas, casi niñas, de una escuela de auxiliares de enfermería de la Armada, y 1,000 cadetes de una escuela de submarinistas. Sin embargo, la cifra real era de cerca de 10,500 personas que hacían un hacinamiento realmente terrible.
La Kriegsmarine estaba informada de la presencia de submarinos rusos en la salida de la bahía de Danzig, y por tanto los transportes atestados de pasajeros se exponían a ser torpedeados si no tenían protección antisubmarina.
Wilhelm Gustloff con pintura de buque hospital
Curiosamente, el Gustloff, estaba comandado por dos oficiales, los capitanes Friedrich Petersen (civil) y Wilhelm Zahn (Kriegsmarine). El 30 de enero de 1945, recibió la orden de zarpe; el buque, atestado como estaba, zarpó de la bahía de Lübek; afuera lo esperaban dos torpederos escoltas, el velero transatlántico Hansa, el torpedero T-36 y el torpedero Löwe.
El 30 de enero el buque navegaba con un viento borrascoso y gélido, y en total oscurecimiento. Hacia las 21 horas se le informó por radio que un dragaminas se le acercaba, y el capitán Petersen ordenó encender las luces de navegación para no chocar con éste. El buque, con las luces encendidas, fue detectado por el submarino soviético S-13, al mando del capitán de corbeta Alexander Marinesko, quien ordenó de inmediato cargar 4 torpedos mientras se colocaba en posición de ataque. Debido a la limitación de personal, a Marinezco, quien tenía pendiente una especie de tribunal disciplinario por una grave falta, éste tribunal le fue suspendido hasta su regreso de una operación en el mar Báltico.
A las 21:08 horas 3 torpedos hicieron impacto por el costado de estribor del Wilhelm Gustloff. El primer torpedo alcanzó el sector de proa. El segundo dio en el sector de la piscina interior en la cubierta E, matando a la mayoría de las enfermeras de la marina, el tercero dio hacia la popa inutilizando los generadores y cortando la energía eléctrica.
El Gustloff se escoró a estribor, cundió el caos interior y la oscuridad. Miles de fugitivos saltaban a las heladas aguas y otros miles luchaban por salir del navío incluso por los ojos de buey. El desorden causó que no hubiera una evacuación ordenada, ni correcto uso de los botes salvavidas. Hacia el final del hundimiento el navío se adrizó lo que permitió la salida hacia las heladas aguas, de más personas. El Gustloff tardó 44 minutos en irse al fondo, en 44 metros de profundidad.
Acudieron inmediatamente al lugar del hundimiento el torpedero T-36, que rescató 564 sobrevivientes, el torpedero Löwe logró sacar 472 personas de las gélidas aguas, el vapor Göttingen salvó 28 sobrevivientes, otro torpedero, el T-19 rescató a 7 personas, el carguero Gotland tomó a dos personas y una lancha schnellboot V-1703 rescató a un bebé.
En total se rescataron 1,239 personas, pero perecieron unas 9,343 ya por quedar atrapadas y ahogadas al interior del navío o por hipotermia. Los capitanes Petersen y Zhan salvaron sus vidas, mientras que de las 375 enfermeras de la marina sólo se salvaron tres. Después de la guerra los rusos dinamitaron los restos del buque sin lograr destruirlos, y fueron filmados en 1955 por buzos de agua profundas. []
El capitán Alexander Marinesko, comandante del submarino que hundió al Gustloff, 10 días más tarde de este ataque hundió al transporte General Von Steuben, que se encontraba, como el Gustloff, en misión de evacuación de refugiados y heridos. Este transporte, así bautizado como homenaje a un general alemán que participó en la guerra de Independencia de los Estados Unidos, transportaba 2,800 soldados heridos, 30 médicos, 320 enfermeros, y 800 refugiados.
De este ataque sobrevivieron solamente 659 personas, que fueron salvados por la lancha torpedera PT 159. De las dos acciones mencionadas, el libro de Günter Grass publica un comentario que explica toda una política vigente sobre el particular “… Ninguno de los dos bandos dio publicidad al hecho: los alemanes para no minar la moral de la población, y los rusos para no difundir el asesinato de tantos inocentes.”
Transatlántico “General Von Steuben” (Fotografía en la Wikipedia)
Sobre este suceso, Marinesko alegó que los buques alemanes eran blancos militares legítimos, pues no tenían apariencia embarcaciones civiles o buques hospitales o de transporte. Sin embargo no se le concedió el título de “Héroe de la Unión Soviética”, dado su carácter pendenciero, uso del alcohol y violaciones a la disciplina. Se le quitó el mando del submarino y se le asignó un cargo en tierra. Una acusación de malversación de fondos lo mandó posteriormente a un campo de concentración, de donde salió arruinado e indigente. Falleció de úlcera, en Leningrado. En 1990 fue reivindicado como “Héroe de la Unión Soviética”, al cumplirse el 50° aniversario de la Gran Guerra Patria, a la cual él contribuyó, causando el mayor desastre naval de toda la historia.
El 13 de marzo de 1933, Adolfo Hitler, nombró como ministro de Instrucción Popular y Propaganda, a Joseph Goebbels, (1897- 1945), dueño de algunas cualidades intelectuales, y hombre de confianza de Hitler. Goebbels, como intelectual que era, comprendió la importancia que tendría el cine, para la difusión de la doctrina y de las acciones del gobierno del Reich. Es de anotar que para entonces el cine alemán era el más importante de Europa. Tanto Hitler como Goebbels admiraban y gozaban del cine norteamericano.
Esta afición llevó a Goebbels a proponer que el estado alemán, produjera películas heroicas o históricas según el modelo técnico americano, pero con un contenido fuertemente político a favor del III Reich. Este asunto fue llevado ante Hitler, quien sin reservas lo aprobó, dado su conocimiento del poder del cine como medio de difusión política, y su confianza en Goebbels.
Este, entonces se dedicó a proponer un filme de contenido anti británico. Estaba corriendo el año de 1940 recién iniciada la II Guerra mundial, y Hitler viendo esta propuesta como una potente arma anti británica, mostró su aprobación y autorizó un presupuesto equivalente a 180 millones de USD, para la época una cantidad muy considerable.
La propuesta era de un filme en el cual la industria astillera inglesa, al igual que toda la industria británica, y en general la sociedad inglesa mostraban estar dominadas por la corrupción y la codicia del sistema económico. Además de contener imprecisiones y calumnias, el guión que contenía también, como cualquier película para el público, amores, matrimonios etc. finalmente es aprobado por Goebbels y por Hitler, y se inicia la producción con el nombre, naturalmente, de “Titanic”. Goebbels contrata como director, a Herbert Selpin, director de cine conocido, quien tenía algún renombre en el mundo del cine, además de que era afecto al partido nazi. Selpin hombre de carácter fuerte, muy ambicioso y egoísta, contrata para la elaboración del guion final a su amigo Walter Zerlet Olfenius.
Así, hacia finales de 1940, contando con el apoyo de los hombres más poderosos de Reich, comienza la producción. Selpin no ahorra en gastos del filme ni en fiestas con las actrices y gente del cine. A medida que va pasando el tiempo, estas fiestas se van haciendo más notorias, mientras el resto de la población alemana comienza a sentir las privaciones y limitaciones de una guerra.
Se construyen inmensos estudios en tierra, se construye un inmensa réplica del “Titanic” (cerca de 1/5 del tamaño real), que se lleva a un lago relativamente cercano a la antigua frontera con Polonia. Pero para el director Selpin, para las escenas finales del hundimiento del “Titanic” se requería algo realmente espectacular: un buque verdadero, con un porte parecido al del “Titanic”. El apoyo de Hitler y Goebbels, hace que se le asigne un transatlántico de estas características, con tripulaciones reales, gente de la Kriegsmarine y de la Whermacht. La filmación se inicia a finales de 1941. A partir de ahora, Selpin comienza a usar en el buque su poder, como si fuera un general o un almirante “de verdad” para terminar el filme. Pero las cosas van cambiando, las relaciones entre Selpin y Zerlet se van enfriando, pero en las fiestas el licor sigue fluyendo, y en algunas de éstas, las críticas de Selpin contra Hitler y Goebbels, contra el gobierno, contra la economía y contra la Wehrmacht, son escuchadas por la tripulación y por gente que trabaja en el filme en el buque.
Finalmente Zerlet lo delata ante la Gestapo; rápidamente Goebbels lo encara, Selpin acepta su falta de lealtad con el régimen y con Goebbels. Es detenido inmediatamente y el 1° de agosto de 1942, las autoridades informan que Selpin fue “encontrado muerto en su celda”, ahorcado con sus propios tirantes. La película fue terminada en 1943, utilizando el buque mencionado, por alguno de sus ejecutivos subalternos, pero no fue exhibida sino en los países entonces ocupados por Alemania, pues aunque el buque no era alemán, el sufrimiento de civiles en un naufragio podrá minar la moral de los alemanes.
Pero ¿cuál era ese hermoso buque, ahora asignado a la Armada alemana, que con la anuencia de Hitler y Goebbels, le fue facilitado a Selpin para la filmación de esa película, de la que se esperaba obtener un éxito gran político?.
Se llamaba Cap Arcona, y cuando se usó para la filmación del “Titanic nazi” se encontraba en el puerto de Lübek. Su historia después de este episodio artístico es bien trágica.
El vapor “Cap Arcona” era un lujoso crucero de pasajeros, propiedad de la línea alemana Hamburgo – Sudamérica, HSDG. Fue construido por el astillero Blohm & Boss, en Hamburgo, y botado al agua, en mayo de 1927
Tenía 27,650 toneladas de Registro Bruto, eslora de 206 metros, y manga de 25.8 metros. 4 calderas le suministraban vapor a dos turbinas, para una potencia de 15,560 KW. Era de porte muy esbelto, parecido al del “Queen Mary”; (ver fotografía) y durante 12 años llevó pasajeros, mostró la bandera alemana en todo el mundo, y recibió el apodo de “Reina de Atlántico Sur”. Era el orgullo del III Reich.
El 25 de agosto de 1939, el buque fue transferido a la Kriegsmarine, y el 1° de septiembre del mismo año, cuando por orden de Hitler las fuerzas alemanas invadieron a Polonia, el “Cap Arcona” fue trasladado al puerto, antes polaco, de Danzig (Gdansk).
El buque quedó disponible para la filmación de la película “Titanic”, mencionada atrás, en 1943. En 1944, ante el avance de las tropas rusas hacia el interior de Alemania, fue utilizado para evacuar civiles y soldados de la Whermacht entre Danzig y Copenhague.
Cap Arcona saliendo de un puerto alemán, cerca de 1938 (Fotografía en la Wikipedia)
Al regresar de uno de éstos viajes quedó averiado, fue reparada en Copenhague, y regresó a Danzig, quedando allí fuera del servicio debido al poco mantenimiento que se le había venido dando.
Ante el incontenible avance de los aliados hacia el interior de Alemania, el 14 de abril de 1944, el jefe de las tenebrosas SS, Henrich Himmler, ordenó no dejar con vida a ninguno de los prisioneros de los campos de concentración, tales como el de Neuengamme, a unos 25 kilómetro de Hamburgo, con el objeto de no tener testigos ante un juicio, que se veía llegar, contra las atrocidades de la SS.
La motivación para esta criminal orden no tenía sentido, ya que en todas formas los aliados ya habían conocido los horrores ocurridos en otros campos de concentración. La orden de desocupar los campos de concentración y exterminio produjo nuevas crueldades; los prisioneros fueron obligados a caminar desde sus campos hasta Lübek; miles murieron por la caminata, y muchos otros fueron muertos a tiro de pistola en las cunetas de las carreteras.
Puesto que deshacerse de miles de cadáveres era bien difícil se decidió usar los transportes Athen, Thielbeck, y los transatlánticos Deutschland, acondicionado como hospital, y Cap Arcona, para embarcar a los deportados y prisioneros, encerrarlos allí bajo vigilancia de las SS y después hundir los buques con su carga humana.
El jefe de la SS en el área de Hamburgo ordenó llevar a los deportados y prisioneros a bordo del Cap Arcona y a los otros buques que estaban fondeados en la bahía de Lübek. En esta forma a finales del mes de abril de 1945, a bordo del Cap Arcona había seis mil quinientos prisioneros y seiscientos soldados de las SS.
Un oficial de las SS ordenó desembarcar de estos buques, todos los chalecos salvavidas y los elementos de madera que pusiera servir como flotadores; el buque se había convertido en un infierno en el que morían diariamente 30 o más personas, de enfermedades, de sed, de hambre o debido al hacinamiento.
En la tarde del 30 de abril se conoció que Hitler se había suicidado, Goebbels había sido nombrado transitoriamente como Canciller del Reich (al día siguiente se suicidó) y que el Reich estaba siendo ocupado por los rusos. La guerra se había acabado, sin embargo seguían llegando a Lubek prisioneros y niños, que iban siendo embarcados en el Cap Arcona.
Por esos días, toda la costa norte Alemana era un desorden, y miles de personas, huyendo de las tropas rusas que se aproximaban, trataban de huir en cualquier embarcación hacia el occidente, ocupado ya por los aliados, o hacia Noruega, ocupada aún por Alemania. La aviación aliada procuraba impedir esos desplazamientos, y realizaba vuelos de reconocimiento.
Así, en la mañana del 3 de mayo de 1945, aviones de combate de la RAF, pertenecientes al Grupo 83 de la 2nd Tactical Air Force volaron sobre Lübek y observaron los 4 buques mencionados, que portaban la bandera del III Reich. Los prisioneros desde los buques hicieron señales para advertir de su presencia, pero posiblemente no fueron observados por los pilotos.
Dos oficiales británicos se presentaron ante la oficina de la Cruz Roja en Lübek para confirmar la información sobre la presencia de prisioneros a bordo de los buques. Infortunadamente, cuando se confirmó esta información, ya era tarde para impedir un ataque aéreo. En el curso del día siguiente, varios aviones caza Hawker Thyphoon de la RAF, armados con sus 4 ametralladoras Hispano MK II, 8 cohetes RP3 aire – tierra, y 2 bombas de 1,000 libras cada uno, se presentaron en la bahía de Lübek, y procedieron a atacar los buques, que izaban la bandera alemana.
El transporte - buque hospital Deutschland.
Fue el primero en ser atacado; recibió fuego de ametralladoras, y de bombas sin sufrir daños mayores, Su comandante, con sábanas improvisó una bandera blanca, como señal de rendición y logró encallar el buque logrando que su tripulación y el cuerpo médico fueran evacuados a tierra. No se presentaron muertos.
La acción se concentró ahora contra el Cap Arcona y el Thielbeck, que recibieron entre 30 y 40 bombas. En el primero, quienes estaban en los camarotes y salones pudieron salir a las cubiertas, pero al saltar al agua fueron recibidos por el fuego de soldados de la SS, apostados allí para acabar con todos, en las cubiertas, o aún entre el agua.
Bajo la cubierta había 4,500 personas. Causados por las explosiones se originaron en el buque varios incendios; imposibilitados por huir de las bodegas muchísimas murieron asfixiadas. El buque comenzó a escorarse, quedando parcialmente hundido; algunos de los prisioneros y tripulantes lograron salir a cubierta y arrojarse al agua, y nadar hasta la orilla.
El Cap Arcona bajo ataque de la RAF
El capitán Bertram, comandante del buque, se abrió paso, machete en mano, entre los prisioneros que abarrotaban el puente, las cubiertas, y la nube de humo que se había desatado, y abandonó el buque. Los restos del Cap Arcona permanecieron encallados en la bahía de Lübeck hasta 1950; luego los buceadores lo desmantelaron y lo redujeron a chatarra. Sobre el espigón de Lübeck, estos restos fueron estudiados y fotografiados en detalle por la firma Rolls-Royce, que había fabricado las bombas inglesas, con el fin de evaluar su eficacia.
El transporte Thielbeck se hundió rápidamente, y de los 2,800, solamente se salvaron 50 prisioneros. El buque, sacado a flote y reparado, fue puesto en servicio con el nombre de Reinbek. En 1961, fue vendido, y navegó con bandera panameña hasta 1974, cuando fue desguazado en Split, en la ex Yugoslavia. Al desguazarlo, aparecieron esqueletos entre los mamparos. Los restos de los cadáveres encontrados entre sus partes fueron colocados en 49 ataúdes y descansan finalmente en paz en el sector Cap Arcona del cementerio de Lübeck.
El Transporte Athens. Al igual que el Deutschland, logró salvar su carga humana, que consistía en unos dos mil prisioneros. Su comandante izó una bandera blanca y encalló el buque. Los prisioneros, más tarde, fueron liberados por las tropas aliadas.
La Unión Soviética se apoderó del Athens como indemnización de guerra y lo rebautizó General Brusilow. El 27 de mayo de 1947 fue obsequiado a Polonia. Rebautizado como Warynski, siguió navegando durante mucho tiempo entre Gdansk (ex Danzig) y Buenos Aires. En 1973 quedó fuera de servicio y se utilizó como depósito flotante en la ciudad polaca de Stettin,
En resumen, como consecuencia del ataque inglés, fueron muertos 4,450 prisioneros del Cap Arcona, y 2,750 del Thielbeck. No hubo pronunciamiento del gobierno británico, salvo la explicación de que la presencia de una flotilla alemana cerca del Cap Arcona, los indujo al error de atacar los 4 buques.
Tampoco se les rindieron honores fúnebres a las 7,200 víctimas. Se cavaron fosas comunes en la playa entre Lübeck y Pelzerhaken, algunos de los sobrevivientes mandaron a construir un monumento fúnebre en que se lee: "A la memoria eterna de los deportados del campo de concentración de Neuengamme. Murieron durante el naufragio del Cap Arcona el 3 de mayo de 1945".
Esta tragedia se considera un verdadero crimen de guerra, pero ha permanecido impune y desconocido por los gobiernos de los países involucrados. Hasta los años setenta, el mar Báltico estuvo arrojando los cadáveres y restos de los deportados muertos en esta acción.
Max Pauly ex oficial de las SS y comandante del campo de concentración de Neuengamme y el jefe del campo, Thumann, fueron juzgados, condenados por crímenes de guerra y ahorcados. Muchos otros oficiales de las SS de este campo fueron también juzgados entre 1945 y 1948 por tribunales militares ingleses.
El Almirante Jonathan W. Greenert, Comandante de la Marina de los Estados Unidos (CON) realizó una visita oficial a Colombia. Durante su primer día en nuestro país se reunió con el Ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón Bueno y el Comandante de la Armada Nacional Almirante Hernando Wills Vélez para estrechar lazos de amistad y cooperación entre las Armadas.
El motivo principal de su visita a Colombia es intercambiar conocimientos, obtener una perspectiva sobre cómo la Marina de Estados Unidos puede contribuir a la estabilidad y la seguridad en la región.
Como miembro del Comando Conjunto de los Estados Unidos, el Almirante Jonathan W. Greenert, es el principal consejero naval para el Presidente de los Estados Unidos y para el Secretario de la Marina en lo relacionado a la conducción de las actividades del Departamento de Marina, por lo que se destaca su reconocimiento a Colombia como un aliado estratégico en temas de entrenamiento y apoyo.
El Almirante Greenert viajó a Cartagena, donde en compañía del Almirante Wills visitó el Museo Naval de Cartagena, la Escuela Naval de Cadetes “Almirante Padilla” y las instalaciones de la Fuerza Naval del Caribe, donde abordó el ARC “7 de Agosto” buque construido en el astillero de la Corporación de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo de la Industria Naval, Marítima y Fluvial - COTECMAR.
Allí recibió la condecoración Orden del Mérito Naval “Almirante Padilla” en la categoría de Gran Cruz, como reconocimiento a sus permanentes acciones para incrementar los vínculos de amistad y cooperación entre las Armadas de Colombia y Estados Unidos, así como su apoyo decidido en la lucha contra los delitos transnacionales como el narcotráfico.
La Armada Nacional continuará realizando alianzas estratégicas con las Marinas de diferentes países con el fin de adquirir conocimientos y potenciar sus capacidades operacionales.
Las acciones de la Armada Nacional en los procesos de planeamiento, inteligencia, comando, control y ejecución de operaciones militares, tanto en los ríos, como en las costas, jurisdicción terrestre y marítima, han sido definitivas para la consolidación de los objetivos estratégicos de las Fuerzas Militares, propuestos en el Plan de Guerra “Espada de Honor”, con sus cuatro Fuerzas Navales y la Fuerza de Tarea Conjunta contra el Narcotráfico “Poseidón”.
Neutralización de terroristas, incautación de alcaloides, pesca ilegal, capturas de narcotraficantes, ejercicio de soberanía nacional, operaciones de búsqueda y rescate exitosas y participación en ejercicios navales internacionales son algunas de las operaciones que realizó la Armada Nacional durante el año 2014, que le permitieron impactar de manera positiva en la población y golpear contundentemente a los grupos narcotraficantes.
Durante este año se logró la incautación de cerca de 78 toneladas de cocaína, evitando así que más de 2 billones de dólares entraran a las finanzas de los grupos narcoterroristas. De igual forma, se han logrado importantes incautaciones de insumos sólidos y líquidos para la producción de alcaloides; más de 102.000 galones de insumos líquidos y más de 194 toneladas de insumos sólidos han permitido dar un significativo golpe a las organizaciones narcoterroristas, ya que esto afecta la producción de alcaloides y por ende su posterior distribución. Se destruyeron de manera controlada 106 laboratorios y cristalizadores y 57 cocinas rústicas para el procesamiento de alcaloides. Así mismo, se erradicaron 281 hectáreas de cultivos ilícitos de hoja de coca, en las áreas de responsabilidad de los departamentos de Chocó, Valle, Cauca, Putumayo, Caquetá y Meta.
La presencia permanente de los hombres y mujeres que protegen el azul de la bandera en operaciones militares permitió la afectación de 173 terroristas entre los que se destacan 78 entregas voluntarias, 20 menores de edad rescatados del conflicto, 74 capturados y 1 muerto en combate. Así mismo, se logró la neutralización de 133 integrantes de las bandas criminales al servicio del narcotráfico, 365 narcotraficantes y 722 sujetos de delincuencia común.
Durante estas operaciones se incautaron 102 armas de largo alcance, 11 armas de apoyo, 381 armas de corto alcance, 378 granadas, más de 32.900 cartuchos de diferentes calibres y más de 7.5 toneladas de explosivos, debilitando el accionar de los grupos al margen de la ley y previniendo acciones terroristas contra la población colombiana y las tropas.
En la lucha contra el narcotráfico ha sido fundamental la incautación de artefactos semisumergibles, con los que los traficantes buscan evadir el control marítimo para transportar su mercancía, en el año 2014 fueron localizados 4 de ellos en la costa pacífica, en los que se destaca uno de ellos que tenía la capacidad de llegar hasta costas mexicanas y otro que era accionado a control remoto.
En cuanto a la protección de los recursos naturales, fueron incautadas más de 8.700 kilos de pesca ilegal e inmovilizadas múltiples embarcaciones por no cumplir con las normas establecidas por la Autoridad Marítima Nacional; se incautaron cerca de 11.000 metros cúbicos de madera talados de forma ilegal, 275 kilogramos de pieles de animales y se recuperaron 2.605 tortugas y más de14.294 huevos de estas tortugas en vía de extinción, cerca de 1.158 babillas, más de 696 caracoles y 52 langostas.
El trabajo decidido de Guardacostas y de los diferentes buques de la Armada Nacional ha sido fundamental para contribuir a salvaguardar la vida en el mar, como lo demuestran las 1.282 personas rescatadas en 262 operaciones, ratificando el compromiso institucional de la protección de la vida humana. Así mismo, fueron hallados 278 migrantes ilegales, tratando de cruzar las costas colombianas con rumbo a los Estados Unidos, gran parte de ellos cubanos y asiáticos.
La Armada Nacional garantiza la protección a la infraestructura crítica de la nación en su jurisdicción, como lo son la infraestructura energética y vial, así como la protección de las líneas de comunicación marítima, lo que permite el desarrollo de los intereses marítimos de Colombia, lo que se ha visto reflejado en las más de 11 mil millones de toneladas de carga llegada al país y más de 16 mil millones de toneladas de carga salida del país.
El ejercicio de la soberanía durante el 2014 en el archipiélago de San Andrés y Providencia se hizo sin ahorrar esfuerzos por parte de la Armada Nacional. Fragatas, patrulleras oceánicas, unidades de reacción rápida, aviones patrulleros marítimos y helicópteros operados por un personal comprometido con la misión, permanecieron los 365 días del año en toda la jurisdicción, en cumplimiento de las líneas de acción estratégicas ordenadas por el Gobierno Nacional.
Así mismo, en el archipiélago se adelantó un importante trabajo en beneficio de la comunidad mediante jornadas interinstitucionales realizadas, que también permitieron mostrar una Institución responsable y comprometida con la población civil, que vela permanentemente por su seguridad, progreso y desarrollo. De esta forma llegaron al archipiélago 7 kioscos vive digital, kioscos a San Andrés, Providencia, Serrana, Serranilla y Albuquerque, con los que además de mejorar las comunicaciones con los Puestos Navales Avanzados de las islas, donde anteriormente no había internet, van a permitir que los pescadores y marinos que navegan por la zona puedan tener acceso en caso de necesitarlo. Así mismo, mejorarán los tiempos de respuesta en caso de alguna emergencia de algún pesquero o embarcación que navega por el área.
En el 2014 por primera vez una unidad naval colombiana participó en la Operación Naval más importante del mundo RIMPAC 2014, en la que 23 naciones realizaron ejercicios con el fin de fortalecer sus capacidades para atender desastres, el desarrollo de operaciones de control marítimo y operaciones navales complejas en las áreas de guerra antisubmarina, guerra de superficie, guerra antiaérea y operaciones anfibias, y realizaron ejercicios de lucha contra delitos transnacionales como piratería, trata de personas, narcotráfico y operaciones de búsqueda y rescate.
El año 2014 será recordado por el inicio de la Primera Expedición Científica de Colombia a la Antártida, misión de ciencia, geopolítica, estrategia y cooperación internacional, en la que el buque ARC “20 de Julio” realizará un recorrido de 14.417 millas náuticas, durante el cual el grupo de expedicionarios arribará a 12 puntos sobre el Océano Pacífico para realizar intercambios de conocimientos con países como Argentina, Chile, Brasil, Ecuador y Perú. Así mismo, se visitarán bases científicas en la Isla de Greenwich y Rey Jorge, como parte del programa Antártico colombiano que lidera la Armada Nacional.
Los procesos administrativos, logísticos y la profesionalización del personal, permitieron completar los requisitos, para que la institución renovara los certificados del Sistema de Gestión de Calidad por el ICONTEC.
Durante el año 2014 la Armada Nacional ofrendó la vida de un suboficial que falleció en el cumplimiento de su deber y soñando con una patria mejor; así mismo resultaron heridos 24 tripulantes aportando todo de sí para lograr la tan anhelada paz.
La Armada Nacional ratifica de esta manera para el año 2015 su compromiso de continuar realizando operaciones exitosas, contribuyendo a la seguridad de su jurisdicción y velando por el bienestar de la comunidad, además de cumplir con las misiones constitucionales encomendadas como lo son la salvaguarda de la vida humana en el mar, la lucha contra toda clase de delito transnacional, la protección de las líneas de comunicación marítima y los recursos naturales, así como la defensa de la Soberanía Nacional.
En ceremonia militar presidida por el señor Vicealmirante Leonardo Santamaría Gaitán, Jefe de Operaciones Navales de la Armada Nacional, se llevó a cabo el relevo del Comandante de la Fuerza Naval del Pacífico en las instalaciones de la Base Naval ARC “Málaga”.
Luego de un año y tres meses, el señor Contralmirante Pablo Emilio Romero Rojas entregó el Comando de la Fuerza Naval del Pacífico al señor Contralmirante Ernesto Durán González, quien se desempeñaba como Director General Marítimo. A su vez, el Señor Contralmirante Pablo Emilio Romero Rojas, asumió desde el pasado martes la Dirección General Marítima, en la ciudad de Bogotá.
Bajo el liderazgo del señor Contralmirante Pablo Emilio Romero Rojas, la Fuerza Naval del Pacifico desarrolló importantes operaciones contra el narcotráfico, logrando la incautación de más de 37 toneladas de clorhidrato de cocaína, más de tres y media toneladas de marihuana. De la misma manera, fueron incautados más de 80.000 galones de insumos líquidos y cerca de 120 toneladas de insumos sólidos, material usado para la producción de alcaloides; por otra parte se destruyeron más de 120 estructuras para la fabricación de alcaloides entre cocinas rústicas, laboratorios y cristalizadores, así como cerca de 200 vehículos y embarcaciones para el transporte ilegal de narcóticos, entre ellos un sumergible y tres semisumergibles.
Así mismo, una fuerte ofensiva contra los grupos al margen de la ley fue desarrollada logrando la captura de 5 miembros de las Farc y el ELN, la muerte en combate de 6 integrantes de estos mismos grupos terroristas y la desmovilización de otros 36, así como la captura de 52 integrantes de redes de apoyo al terrorismo y la desmovilización de 38 de estos individuos. De la misma manera, con apoyo de otros organismos de seguridad del Estado se logró la captura y sometimiento a la justicia de 111 sujetos pertenecientes a bandas criminales al servicio del narcotráfico.
Durante su gestión, se desarrollaron planes especiales de intervención ordenados para los casos de Buenaventura y Tumaco, los cuales permitieron la captura de los principales cabecillas y mandos medios, logrando cifras de casi una captura diaria. Se redujeron las tasas de homicidios en un 51% comparando los periodos 2010 – 2014. Se incrementó la confianza de la población civil, reflejado en el incremento de denuncias. En Tumaco se logró incrementar la afectación en un 75% a la autodenominada Columna Móvil “Daniel Aldana” de las Farc golpeando significativamente sus finanzas.
Con las unidades de Superficie, Guardacostas y Aeronavales, se logró el rescate de 480 personas con vida en el mar en desarrollo de operaciones de búsqueda y rescate; y con el fin de proteger la soberanía nacional, los recursos naturales y permitir el uso legal de sus aguas en el Pacífico colombiano, fueron incautadas más de cuatro toneladas de pesca ilegal y se retuvieron 97 migrantes ilegales en operaciones contra estos delitos.
La Fuerza Naval del Pacífico está integrada por más de 7.500 hombres y mujeres que tienen la misión de desarrollar operaciones ofensivas en 339.500 kilómetros cuadrados de mar territorial, hacer presencia en 1.300 kilómetros de costa en el Pacífico colombiano, patrullar y mantener la seguridad y tranquilidad en 26 mil kilómetros cuadrados de jurisdicción terrestre y fluvial.
Por Carlos Del Castillo Olaya
Apreciados compañeros del contingente 30: Adjunto las palabras que pronuncie durante la ceremonia funeral de nuestro compañero y hermano JUANITO GAITÁN.
Apreciados amigos:
Hoy nos reunimos para despedir a un ser excepcional. El vicealmirante Juan Gaitán González.
Fue un 1º. De agosto del año 1.957 cuando un grupo de bogotanos volamos hacia Cartagena, e iniciamos un recorrido en la vida marinera, cartagenera y profesional.
De esas personas, Juanito llegó al grado de Almirante, siguiendo una extraordinaria trayectoria la cual incluyó, principalmente, su unión matrimonial con Elenita Cabiedes con quien formó un precioso hogar trayendo al mundo tres hijos, Carmen Helena, Juan Antonio y Alfredo quienes a su vez lo complementaron con un yerno, al Almirante Pablo Emilio Romero, y las nueras Luchy y Adelita: uniones que dieron, a Juanito y Elenita, 6 nietos: Susy, Juan Pablo, Alejandro, Jimenita, Juan Andrés y Ana Sofía.
Digo que fue un ser excepcional pues como esposo, padre, abuelo y miembro de la Armada Nacional, siempre se caracterizó por su honestidad, lealtad, carácter y bondad, complementado con su rígido espíritu militar.
A Elenita la conoció recién graduado y desde el primer momento fue ella su faro guía en todas las singladuras emprendidas desde su joven trayectoria.
Su extenso recorrido en sus 50 años de matrimonio, cumplidos hace unos pocos días, es amplio y lleno de satisfacciones.
Recordar todos sus eventos sería algo muy extenso, pero sin duda todos fueron marcados por una actitud siempre correcta y positiva.
Le fue asignado al ingresar a la Escuela Naval el número 30-020 identificaciones de cadete que a cada uno nos correspondía.
Luego fue escalando los peldaños de la carrera del mar desde Teniente de Corbeta en el año 1962 hasta el grado de Vicealmirante, retirándose en el año de 1996 después de 39 años de servir a la patria y luego de haber ocupado importantes cargos entre los que se resalta la dirección en la construcción de la base naval de Bahía Málaga.
Ya en retiro, entre otras, fue el Vicepresidente de Acore en nuestra Seccional Bolívar, donde contribuyó extraordinariamente en la modernización de esta sede, a la cual le puso todo su empeño y dedicación voluntaria y decidida.
Hoy Juanito da fondo a su ancla al arribar al puerto donde recalaremos al fin de la ruta que el Todopoderoso nos ha trazado.
Paz y abrigo en ese remanso donde los viejos marinos llegamos al eterno descanso.
Quiero seguidamente leer, las sentidas expresiones del Dr. Pedro González, otro compañero y amigo que apreció mucho a Juanito:
Pedro se pronuncia en la siguiente forma:
Al inicio de los tiempos se decía “en la tumba de un marino no florecen las rosas…” incuestionable verdad que cedió al paso del tiempo, y es por ello que las rosas que sembraste al paso de tu vida familiar, en la cotidianeidad de tu trabajo, en nosotros tus hermanos, florecerán en un relicario perdurable en la región azul del pensamiento.
No partiste como los marinos de la antigua usanza, en medio del fragor de la batalla.
Te llegó el reposo del guerrero rodeado de los tuyos por los que luchaste y que mucho te aman; de tus compañeros; de amigos; de todos los que gozamos el privilegio de tu amistad.
Supiste aunar y atesorar, en tu brillante trayectoria de marino las virtudes que el gran arquitecto te deparó:
Hiciste del honor, de la lealtad y la integridad los valores que trazaron la singladura de tu vida, los mandamientos de un excelente caballero del mar.
Estas navegando en el océano del horizonte eterno y nosotros tus compañeros, como antaño, en formación uno, te seguimos en ese mar del infinito.
Juanito, tus compañeros te deseamos buen tiempo y buena mar…
Por David Escobar Gómez / 42-044
Corría el mes de junio. Después de haber rezado con devoción marinera la Oración Patria, la Escuela en pleno se va de Recogida al terminar lo determinado en el Orden del Día. Se puede decir, a simple inspección calendaria, que era un día como los anteriores al momento de disponernos a dormir. Pero no lo fue. Para unos cadetes pudo ser una horrible noche; pero, para otros, un bonito reto a la autoridad.
Formados en el corredor de las camas triples, en completo silencio, veíamos al brigadier de turno caminar en su espacio preservado a su andar marcial de mando nocturno. Cuando consideró necesario, dio la orden de desvestirnos y ponernos la pijama verde alechugada y con manchas producto de los sueños eróticos. Como saben los lectores, antes de llegar al minuto de dada la orden, ya estábamos aireados en postura firme frente a nuestras camarotes de hierro y tablas, y con la pata pelá, en espera de lo que dispusiera el antiguo del contingente 38. Del mismo contingente que se jacta de haber recibido y disciplinado al famoso y muy grande 42. Si la memoria no me falla, ese brigadier era Mauricio Soto.
– ¡Cuento tres para que estén firmes acostados! – gritó el hombre futuro oficial y Almirante de la Armada de Colombia en el año 1967. Y caminó en busca de la salida.
Ya acostado boca arriba, con las manos firmes, esperábamos la siguiente voz de despedida de las buenas noches.
– ¡Buenas…noches, cadetes¡– apagó la luz y salió.
Y como era costumbre, contestamos en un coro varonil:
– ¡Buenas, noches… MI BRIGADIER!
Pero esta vez, se agregó una voz que salió del fondo opuesto del Rancho por donde debería salir para su dormitorio el brigadier, que en falsete amoroso, gritó:
– ¡Hasta mañana mami!
Como es apenas natural, los mamadores de gallo nos alegramos de esa ocurrencia que nos remontaba a nuestra niñez; por supuesto que la línea dura se alebrestó, pues sin un castigo no nos íbamos a dormir.
Llegó la luz.
– Salir a formar con pantaloneta y tenis … ¡ya! -dijo en calentamiento de primer grado el de la gorra con cucarda.
Salimos y formamos en el patio de las formaciones normales del Batallón. Trotamos como unos diez minutos. Ya éramos ciento veinte reclutas, sacando a la Primera Sección que dormía en el rancho pequeño que da a la bahía.
– ¡Al rancho, carrera mar! -Nos ordenó sin haber dicho palabra alguna por el irrespeto materno, siendo él todo un hombre de mar.
Ya en el dormitorio, nuevamente, convencido el futuro Guardiamarina que el castigo había hecho su efecto correctivo, nos ordenó ponernos la pijama y quedar firmes. Entonces, repitió la despedida:
– ¡Buenas noches, cadetes!
– ¡Buenas noches, mi brigadier!
– ¡Hasta mañana mami! – se escuchó de la misma voz; pero con eco, pues se le sumaron dos más
– Hasta mañana mami, la bendición
– Bajar a formar con el fusil…– dijo en una orden cargada de sueño, pero camuflada en su responsabilidad.
Bajamos armados, pero sin municiones, solo portábamos una enorme satisfacción sin saber el desenlace de esa batalla irregular. Dimos una vuelta por el patio del comedor. Y los ejercicios de fusil arriba con agachada respectiva varias veces. Y sin ningún asomo de arrepentimiento a la vista. Es que el amor de madre no se pierde así tan fácil, ni se remplaza con ningún brigadier con tetas llenas de mierda. ¡Nos estaban sacando la leche! Sea, que esa noche, nada de sueños…¡sabrosos! Toda la carga la estábamos dejando en el campo de acción.
Volvimos otra vez a vernos las caras en el centro del Rancho.
– ¡Cadetes, buenas noches!
– ¡Buenas noches, mi brigadier!– esperamos que saliera al corredor de las escaleras y le dimos la ñapa con mucho cariño:
– ¡Hasta mañana mami!
La luz, otra vez, alumbró como con rabia en respaldo a la autoridad, y del mismo tenor escuchamos lo que sabíamos se veía venir, pero ahora con nuevos aditivos.
– Bajar con fusil, banqueta y colchón, ¡Yá!
Como en un trasteo, como abandonando un buque que zozobra, al vernos cargando el incómodo colchón de paja, y para la paja, nos causó risa; pero de la sudada y salada. Corrimos en desorden de buena voluntad hasta el último poste. Lamentando que no hubiera un fotógrafo que dejara constancia de ese hecho significativo en nuestras vidas, parecíamos familias huyendo de una creciente que se avecina. Faltaron las cacerolas. Después de tres horas desde que se inició el zafarrancho materno, estábamos otra vez viéndonos la cara de satisfacción en la formación de Recogida.
El brigadier, cansado también, apagó la luz sin decir esta boca es mía. Subió al cuarto piso en cuerpo y gorra, así como subió al Cielo Remedios la bella en Cien años de soledad.
¡Ganamos la batalla!
El pasado 3 de diciembre de 2014, celebraron sus bodas de oro en la ciudad de Bogotá el señor CN (RNA) Ricardo Alberto Rosero Eraso y su señora esposa Mary Cardona de Rosero.
En la foto el Sr. Capitán Ricardo Alberto Rosero y su señora Mary Cardona con sus hijos: CN (RNA) Ricardo Alberto Rosero Cardona y Marjorie Rosero Cardona - Yerno: Jaime Alberto Aponte Vásquez - nuera: Margarita Meza Sierra - nietos: Nicolás Aponte Rosero, Ricardo Alberto Rosero Meza, María Clara Aponte Rosero y Natalia Rosero Meza.
También los acompañaron en el evento familiares, compañeros y amigos especiales.
CYBER-FELICITACIONES
El apreciado Conti Roberto Spicker y su linda señora María Victoria, celebraron en familia el Año Nuevo.
En la imagen aparecen además sus hijos Roberto, Victoria y Alexandra.
Feliz Año 2015 para tan querida familia.
El VALM Jaime Parra Cifuentes con sus cuatro adorables reinas: su esposa, Olga Jiménez de Parra y sus hijas Claudia, María Fernanda y Olguita, disfrutando a bordo del Celebrity Infinity, el grato crucero desde Valparaíso hasta Buenos Aires, navegando por los fiordos chilenos y pasando por el Estrecho de Magallanes, donde se tomó esta fotografía.
La familia Parra Jiménez y Jorge Serpa brindando en el lujoso salón Atrium del Celebrity, donde compartieron y disfrutaron la rumba para festejar la llegada del año nuevo 2014.
En la fotografía el Sr. Vicealmirante Luis Alberto Ordoñez disfrutando con su adorable señora Nydia Bozzi, una cena musical con sus apreciados hijos Sebastián y Natalia.
Jorge Serpa y su esposa Gladys, posando en Ushuaia, la población situada en más al sur de Argentina, que coloquialmente denominan "el culo del mundo". Este lugar Serpa adquirió energía positiva para continuar la Cyber-corredera.
EN LA TUMBA DEL CAPITÁN LANGSDORFF
Como inquieto historiador, Jorge Serpa estuvo visitando en el Cementerio Alemán, de Buenos Aires, la sepultura del Capitán de Navío Hans Langsdorff, comandante del Acorazado de bolsillo Admíral Graf Spee, protagonista de la primera batalla naval de la Segunda Guerra Mundial, que se denominó “Batalla del Río de la Plata” en diciembre de 1939. Hans Langsdorff, se suicidó luego de auto destruir su poderoso buque, para no enfrentar a la flota inglesa que le esperaba, para atacarlo.
Jesús Castañeda, Rafael Vivas, Jaime Ardila, Guillermo Domínguez, Rafael Díaz, Ernesto Carreño y Eduardo Puentes.
Jesús Castañeda, Guillermo Uribe y Jaime Ardila.
Celebrando su propio “New Year”, el Capitán George con su linda esposa y la tía Tere.
El pasado 20 de diciembre en la Iglesia de Nuestra Señora de los Dolores (Sesquilé) contrajeron matrimonio Luis Felipe Ochoa Rueda y Carolina Rivero Gonzalez
Los recién casados brindando en el Club Naval de Tominé donde se realizó la elegante y grata recepción del matrimonio.
El Coronel IM Ignacio Ochoa Acevedo / 37-037, padre del novio y la hermosa madre de la novia, Lucero González de Rivero, saliendo del templo, luego de la ceremonia religiosa. La corbata del “Rojo” a tono con el vestido de su consuegra.
Esther Lozada de Uribe, Lucero González, Olga Clopatofski y Stella Lozada de Gómez disfrutando la recepción.
La Brigada Caribe dentro de sus actividades, el sábado 20 de diciembre, se reunieron los integrantes con apoyo de las armas especiales en el prestigioso Club ABC de la ciudad de Barranquilla, para conmemorar el décimo primer aniversario de su fundación, que se efectuó el seis de Octubre del 2.003.
En la foto, el Capitán de Ingenieros Jorge Aranda, el Coronel de Caballería Eduardo Achury, el Teniente Coronel Infantería Pedro Atuesta, el Coronel de Artillería Luis Carvajal, Teniente Infantería Carlos Avendaño Puche, Coronel Marcel Arango Bosiga, El Capitán ARC Jorge Alberto Caicedo Correa, Nury, esposa de Melco, Coroneles de Infantería, Adalberto de la Ossa, Eduardo Romero Barrios, Melgarejo Lizcano, Teniente EJC Medico Hugo Bernal Barros, Señoras Madeleine Villeros, Rocío, sentadas Leonor, Elsa, Lourdes y Lenda. Se efectúo una amena tertulia sobre el injusto fallo de la Corte Internacional de los Derechos Humanos referentes al caso del Palacio de Justicia.
La reunión se efectuó al calor de bebidas espirituosas y un excelente menú caribeño de pescado con postre incluido.
Apreciado Enfermero Pinto:
El 30 de Diciembre tuve el gusto de tomarme un café en Orlando FL, con el CC (RA) Capitán de Altura Carlos Alberto Cortés Monje.
Por aquello de la prudencia que me caracteriza no entro en detalles de apodos. Adjunto foto
Saludos
TN(RA) Luis Bernardo Castro
Apreciado enfermero PINTO:
Atentamente le envío un artículo recordatorio de la construcción de nuestro apostadero naval de San Andres isla, hace 50 años-no tengo fotos.
cordial abrazo-- Rodrigo Otálora Bueno. Cap.IM (ra) 6163907
En enero de 1965 arribamos a la isla de SAN ANDRES, un oficial, tres suboficiales, una sección de infantes de marina y un maestro de obra para iniciar la construcción del Apostadero Naval de acuerdo a los planos de DIBUQ. El personal escogido por sus experiencias en construcción y albañilería pertenecía al Batallón de IM. "COSTAS" de Cartagena. En un amplio terreno ubicado en San Luis, sector de Coco-plum bay que fue adquirido por la Armada nos instalamos en antiguas casas de madera tipo isleñas frente al mar. Allí "manos a la obra" y respetando playas, palmeras y medio ambiente todos trabajábamos de 0600 a 1300hrs.El apoyo logístico para las obras estuvo a cargo del ARC. Pedro de Heredia"-Invitamos a las autoridades isleñas, nos presentamos e izamos el Pabellón Nacional. Historias buenas y regulares fueron sembradas con cariño para el pueblo isleño. Hoy recordamos que no fue en vano nuestro esfuerzo.
El primer oficial constructor y quien escribe se llama RODRIGO OTALORA BUENO, Capitan IM (RA)
Bogotá D.C diciembre 18 de 2014
Enfermero Pinto: Reciba un cordial saludo. Por su conducto y por este órgano informativo de la ARC quiero agradecer las muestras de solidaridad de compañeros de armas por la muerte de mi querido suegro Hernán Charria R. (QEPD) padre de mi señora Luz Marina Charria Moreno, acaecida el 30 de Noviembre de 2014 en la ciudad de Cúcuta, a ellos con sus distinguidas señoras y familiares mis agradecimientos.
General Jaime A. Lasprilla Cdte EJC, Vicealmirante Rodolfo Amaya K. Segundo Comandante ARC, General EJC (RA) Rafael Samudio M, Alm. (RA) Sergio García T, General EJC (RA) Jorge Enrique Mora, General (RA) FAC Edgar Lesmez, General -FAC (RA) Jorge Ballesteros, Alm. (RA) David René Moreno, Alm. (RA) Guillermo Barrera H., General (RA) Oscar Gonzalez P, General (r) Oscar Naranjo, MG EJC (RA) Juan Salcedo Lora, Valm (RA) Ignacio Rozo, Valm (RA) Alfonso Calero, Valm (RA) William Porras F. , Valm (RA) Alonso Navarro D, Valm (RA) Jaime Jaramillo, Valm (RA) Manuel Rincón, VALM (RA) Jaime Parra Cifuentes, MG-FAC(RA) Ricardo Rubiano Groot, MG FAC (RA) Gustavo Ocampo, Calm (RA) Luis Carlos Jaramillo P., CALM (RA) Alberto Rojas T., BG- (r) Luis F. Estupiñán, CN Felipe Mantilla, CN Orlando Huérfano, CN (RA) Jorge Orjuela P, CN (RA) Julián Porras, CN( RA) Manuel Rincón, CN (RA) Nelson Gil H, CN (RA) Jaime Torres, CN (RA) Saulo Tamayo, CN (RA) Miguel Barrios, MY-EJC (RA) Jaime Bernal Martínez, CC (RA) Carlos Méndez, Dr. Serpa (Enfermero Pinto), CF (Reserva) Henry Antes P., CT -EJC (Reserva) Germán Vargas lleras, CT -EJC (Reserva) Hernando Quintero, Tte-EJC (Reserva) Juan Carlos Bernal, CN (RA) Luis Fernando Díaz Correa y CRIM(RA) Héctor Aguas.
De igual manera a la Asociación y su Junta Directiva de los Señores Generales y Almirantes de la Reserva Activa de las FF.MM, así como el Grupo de Golf del Club Militar "Arrecifes" y "Cóndor"
La muerte no nos roba los seres queridos. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente Francois Mauriac, Escritor francés.
Cordialmente,
VALM (RA) Luis Fernando Yance V.
Buenos días:
Soy el Capitán de Navío Reynaldo Espinosa, Ayudante General del Comando de la Armada Saliente.
Les agradezco me incluyan mi correo Reynaldo.espinosa@armada.mil.co
Estaré a sus órdenes como comandante del ARC Gloria ....
Muchos saludos y muchas gracias,
Un abrazo con cariño desde México para mí querido teniente Calderón.
Saludos cordiales.
Ing. Antonio Hernández (NR-70 046)
Para CYBER-CORREDERA. Dr. Serpa, y todos los que de una u otra forma están vinculados a la revista de la familia de la Escuela Naval de Cadetes, nuestro cordial y fraternal saludo de Navidad y Año Nuevo 2015.
Nuestros mejores deseos.
Gracias por sus comunicados.
Dr. PEDRO NEL OLIVEROS. R., M.D. OFTALMOLOGO,
Cadete Naval, Contingente 25 / 25-058.