Unidos por el mar

y exhaustos por el último poste

 

No 57 

Febrero / 2004

Informativo virtual 

para integrar  la familia naval colombiana 


¿IMAGINACIÓN O REALIDAD?

ACCIDENTE DEL DESTRUCTOR A. R. C “CALDAS” 

-28 FEBRERO DE 1955-


Capitán de Navío
Enrique Román Bazurto CN 17-024 


PREÁMBULO 

El próximo 28 de febrero de 2005 se cumplirán cincuenta años del accidente causado por una enorme ola que barrió la cubierta del destructor A.R C. “Caldas”, adquirido por el Gobierno durante el Conflicto Colombo-Peruano (1930-1936).  En el percance perdieron la vida un oficial, tres suboficiales y tres marineros al caer al mar.  Milagrosamente, uno de los marineros lanzados al mar por la ola, logró sobrevivir  

Reescribo esta crónica animado por el distinguido Capitán de Navío Enrique Martín Salazar, compañero en esta peripecia y entusiasta recopilador de 16 relatos de 4 oficiales y 12 suboficiales, supérstites de aquel aciago día.  Según lo asegura el Capitán Martín, con este esfuerzo desea entregar a los lectores “una lección para los marinos, principalmente para los que tienen una responsabilidad con la dirección del mando y la operación de un buque, pues aprendemos que el mar no perdona descuidos”.  A lo largo de este trabajo irán apareciendo algunos comentarios que figuran en dichos relatos.

Es complicado tratar de reconstruir los hechos y encontrar la verdad pero,  por ahora, lo mejor es resumir algo de lo mucho que se ha escrito al respecto que, desafortunadamente, ha sido una sucesión de verdades y mentiras, novela e historia, contradicciones y coincidencias o de comentarios adversos y favorables a la Armada, como se verá a lo largo de la presente crónica.  De todas maneras se mostrará un panorama general y cada uno de los lectores contará con mas elementos de juicio. 

Sin tener en cuenta el orden cronológico de los escritos seleccionados, desarrollé el tema de tal forma que el lector pueda sacar sus propias conclusiones de lo que sucedió hace cincuenta años, según el resumen de las diversas interpretaciones, así:

·         Primer comunicado de la Armada el 1º de marzo de 1955 a las 08:00 Hs.

·         Modernización de los destructores y accidente del “Caldas”, por el CN Enrique Román Bazurto. Análisis Histórico del Desarrollo Marítimo Colombiano. Octubre 2001.

·         Percance del “Caldas” por el Sr. Vicealmirante Eduardo Wills Olaya, en la Historia de las FF. MM. Tomo IV. Armada. Planeta Colombiana Ed. Bogotá 1993.

·         Versión de Gabriel García Márquez en su libro “Vivir Para Contarla”. Editorial Norma  S.A.. Bogotá 2002.

 

Primer Comunicado de la Armada

OCHO MIEMBROS DE LA TRIPULACIÓN DEL DESTRUCTOR ARC “CALDAS” DESAPARECEN EN EL MAR EN UN LUCTUOSO ACCIDENTE PARA LA ARMADA NACIONAL

Boletín del Comando de la Armada Nacional.  Marzo 1º de 1955  08:00 horas.

El Comando de la Armada Nacional lamenta informar que ayer a las 11:35 horas una ola que barrió la cubierta del Destructor A.R.C. “Caldas” arrastró al mar al siguiente personal de la tripulación de la citada Unidad de la Armada sin que hasta el momento hayan sido rescatados:

Teniente de Fragata                                          Jaime Martínez Diago

Suboficial Jefe Maquinista                                 Elías Sabogal Ruiz

Suboficial 1º Contramaestre                              Julio César Amador Caraballo

Cabo 1º Artillero                                               Miguel Ortega de Ávila

Marinero 1º Artillero                                          Luís José Rengifo Lozano

Marinero 2º                                                      Misael Eduardo Castillo Acosta

Marinero 2º                                                      Ramón Nicolás Herrera

Marinero 2º                                                      Luís Alejandro Velasco Rodríguez

El accidente ocurrió en el viaje del A.R.C. “Caldas”, de Mobile (EE.UU.) a Cartagena, en Latitud 11.06 Norte, Longitud 76.06 West durante un temporal que golpeó fuertemente al buque produciendo un gran ángulo de escora, inmediatamente antes que una ola barriera la cubierta y arrastrara al mar al personal antes mencionado, causando además averías y destrozos sobre cubierta.

Inmediatamente después del accidente el A.R.C. “Caldas” inició la localización y búsqueda de los náufragos y se ordenó a la fragata ARC “Almirante Brión” que se encontraba en las cercanías, en prácticas y entrenamiento, proceder al lugar del accidente para cooperar en la búsqueda.  Además, se ordenó a los buques mercantes que navegaban por las cercanías, cambiar el rumbo y dirigirse al sitio del accidente.  Hasta el momento, cinco buques mercantes colaboran eficazmente en la búsqueda.

La Base Aérea de Coco Solo (Zona del Canal) envió dos aviones de la Armada Americana, que en estos momentos se encuentran volando sobre la zona del accidente tratando de localizar a los náufragos para prestarles ayuda inmediata. La búsqueda continúa por medio de buques y aviones y no se suspenderá hasta tanto se logre el rescate de los náufragos, lo cual se dificulta debido al fuerte temporal y al estado agitado del mar. El ARC “Caldas” fondeó anoche a las 19:30 horas en el puerto de Cartagena trayendo a bordo al Teniente de Corbeta Enrique Román Bazurto quien resultó herido en el accidente.

Fuera del personal mencionado en este boletín ningún otro Oficial o Tripulante del ARC “Caldas” sufrió accidente alguno.

 

Modernización de los Destructores y Accidente del "Caldas"

Cuando el General Rojas Pinilla se encontraba en el poder y como Comandante de la Armada el Capitán de Fragata Jaime Erazo Annexy, alumno fundador de la Escuela Naval y primero de dicho curso en ocupar el máximo cargo de la Institución, resolvieron enviar a mediados de 1954 al Alabama Dry Dock de Mobile en Estados Unidos, los destructores "Antioquia" y "Caldas", para someterlos a reparaciones generales y modernización, con el fin de mejorar el pobre poder naval existente hasta entonces, y contrarrestar en mínima parte la carrera armamentista de Venezuela y el programa de adquisiciones para su Armada; además de adquirir la munición para nuestros destructores en E.U., en lugar de seguirla comprando en Inglaterra.  La principal modificación consistió entonces, en el cambio de los cañones ingleses de 4.7 pulgadas, por otros de fabricación norteamericana con calibre de 5´38 pulgadas y mayor peso, al igual que los castillos blindados de su emplazamiento, lo que a la larga afectó el comportamiento marinero de los buques.  No obstante, al finalizar reparaciones y modernización, pasaron las pruebas técnicas requeridas sobre estabilidad y resistencia. 

Pronto empezarían los problemas.  A su regreso de Mobile a Colombia el ARC "Caldas", apenas abandonó el golfo de México encontró mar gruesa, causada por los fuertes vientos alisios del nordeste, frecuentes en los primeros meses del año, los cuales prolongaron en los días siguientes las malas condiciones del mar con grandes olas, hasta el punto de tener que extremar las precauciones de seguridad a bordo para asegurar la vida de sus tripulantes.  En la noche del 27 de febrero de 1955 las olas tenían cada vez mayor tamaño y el buque empezó a recibirlas por babor, por lo cual lo desviaban de su rumbo.  A las 10:30 horas del día siguiente el buque se hallaba a 30 millas de la costa de Cartagena.  Su Comandante el Capitán de Fragata Jesús Valenzuela, impertérrito, llevaba más de 10 horas en el puente de mando, vigilando con sus ojos de lobo de mar, las actuaciones del timonel y la guardia.  El mar no amainaba y una de las olas lo escoró violentamente a estribor, hasta alcanzar una inclinación de 40°, que lo expuso peligrosamente a la vuelta de campana y se suspendió el flujo de vapor a las máquinas principales, por lo que estas se detuvieron y el buque quedó sin propulsión; además, la gigantesca masa de agua barrió la cubierta principal, llevándose la estiba y el personal que en ese momento se encontraba allí; desplazó de sus calzos una balsa salvavidas y arrancó el carretel de popa que contenía la amarra de codera.

Así, el buque quedó a la deriva como una cáscara en medio del mar.  Los vigías y algunos tripulantes alcanzaron a ver la cabeza de un hombre que apareció en la cresta de una ola, muy lejos del buque; reportaron entonces "hombre al agua", pero a bordo todos estaban impotentes en un buque sin gobierno.  Minutos después se constató con angustia que el mar había cobrado varias víctimas: el Teniente de Fragata Jaime Martínez Diago, los Suboficiales Jefes, Fogonero Elías Sabogal Ruiz, Contramaestre Julio César Amador Caraballo, Cabo Primero Armero Miguel Ortega Ávila y los marineros Luís José Rengifo, Misael Eduardo Castillo Acosta, Ramón Nicolás Herrera y Luís Alejandro Velasco.  Tan pronto empezó a oírse en tierra el S.O.S. lanzado por el "Caldas", zarpó de Cartagena la fragata ARC "Almirante Brion" con la misión de prestar auxilio a los náufragos.  Aviones de la Base de Coco Solo, en Panamá y de la FAC, se dirigieron inmediatamente a las coordenadas geográficas transmitidas por el Destructor para colaborar en la búsqueda de los tripulantes.  Lo mismo hicieron varios buques mercantes que navegaban en las cercanías, encontrándose entre estos el "República de Colombia" al mando del Capitán de Fragata Froilán Valenzuela, padre del Comandante del "Caldas" quien estaba afrontando el trágico momento.

Cuando al fin el "Caldas" pudo levantar presión en sus calderas, recibió orden de regresar a puerto y así lo hizo con sus propias máquinas.  Varios buques y aviones continuaron la intensa búsqueda en la zona durante tres días pero desafortunadamente las labores de reconocimiento no tuvieron ningún resultado.  Entonces la Armada emitió un lacónico comunicado en el cual el oficial, los suboficiales y marineros caídos al mar, se dieron por perdidos.  Se efectuaron honras fúnebres en Cartagena en honor de los desaparecidos.  Las notas del Dies-irie inundaron las naves de la Catedral y al lado de los catafalcos cubiertos por la bandera de Colombia, permanecieron como estatuas los compañeros de armas que prestaban la guardia fúnebre con el manejo del fusil "sobre las armas descansen", con la cabeza inclinada y sus miradas tristes clavadas en las cantoneras de los fusiles.  Los oficiales presentes llevaban cinta de luto en el brazo izquierdo y en la empuñadura de sus espadas y todos los marinos colombianos sintieron la tragedia en sus almas.  En las bases y en los buques, los pabellones estuvieron izados a media asta durante tres días.  Fue la primera tragedia de la joven Armada.

 

Milagro

No obstante, la búsqueda en el mar continuó por diez días más, vislumbrando alguna esperanza.  De pronto ocurrió un milagro.  Toda la prensa llenó sus primeras páginas con la asombrosa noticia.  Sobre las arenas de la playa de Mulatos, cerca al Golfo de Urabá, el viernes 11 de marzo, el campesino Nemesio Vargas encontró un hombre semidesnudo; creyó que era un cadáver con la piel cuarteada por el sol que había sido arrojado por las olas y corriente a las playas cercanas a su terruño.  Apenas se inclinó para verlo mejor, descubrió por los balbuceos que estaba vivo pero físicamente aniquilado.  Como pudo lo transportó a su rancho, lo atendió en la mejor forma, le puso alguna ropa y empezó a administrarle alimentos livianos.  La noticia se regó como pólvora y luego los nativos supieron que se trataba de uno de los náufragos del "Caldas", concretamente Luís Alejandro Velasco; este retorno milagroso fue noticia grande como lo hubiera sido en cualquier parte, por cuanto el marinero Velasco luchó durante diez días con el mar, asido a la balsa que arrancó la ola.  Bebió a sorbos el agua salobre, comió tan sólo un poco de pez volador que capturó cuando súbitamente cayó dentro de la balsa; tuvo que comerse unos cuantos papeles que llevaba en los bolsillos del desgarrado uniforme de trabajo.  Debió luchar contra el miedo y la desesperación de verse solo.  La fatiga lo vencía a cada momento y lo hacía desfallecer.  Así continuaría desafiando los segundos que le parecían horas, hasta que la corriente lo llevó a la costa y allí, exhausto, lo recogió el campesino de Mulatos.

En el momento del accidente Velasco cayó al agua y, al retornar a la superficie, alcanzó a ver muy cerca la balsa que la ola arrojó al mar; se aferró fuertemente a ella y pudo colocarse dentro.  Para mayor seguridad se amarró con uno de los cabos que había allí.  Vio algunos compañeros que trataban de acercarse a él y otros que buscaban con mirada desesperada el auxilio de los botes salvavidas que nunca pudieron arriarse por el mar embravecido; y Velasco, por sí mismo, no podía luchar contra esa ironía del mar cuando se encuentra como potro salvaje.  Finalmente las fieras aguas se tragaron al resto y hacia las dos de la tarde amainó un poco el Caribe.  Velasco fue conducido en avión a Cartagena con el fin de internarlo en el Hospital Naval.  Entre las personas que lo esperaban en el aeropuerto se encontraba su padre Alfredo Velasco.  Tenía los ojos húmedos y no pudo dominar la emoción al abrazar a su hijo, salvado de las aguas por milagro.  Días antes había recibido el único mensaje que el marinero le dirigió desde Mulatos: "Querido Viejo, me encuentro con vida".

Los recuerdos de su odisea por el Mar Caribe fueron oscuros; su ruda lucha contra el oleaje, la angustia, la sed, el hambre y la desesperación.  Experimentó toda la gama, desde el miedo, pasando por el terror, hasta el pánico y recordó horrorizado la trágica desaparición de sus compañeros...  Los periodistas y las cadenas de radio, estaban ansiosos de arrancarle declaraciones.  Pero nada.  Pasó directamente al Hospital Naval y allí no pudo entrar sino su padre.  Sin embargo, la prensa y la radio especularon y escribieron los más fantásticos relatos y novelas.  En el fondo no se le podía quitar la fantasía a esta gran aventura.  Por otra parte, hubo gente ruin que hizo correr especies de motín a bordo; de tripulantes arrojados por la borda a orden del Comandante; de disparos, de marineros y suboficiales que se dejaron ahogar como animales.  La verdad salió airosa de la investigación y el prestigio de la Armada siguió a flote con la misma solidez anterior.

No obstante el reportero de El Espectador Gabriel García Márquez, quien en 1982 se hizo acreedor al Premio Nóbel de Literatura, siguió insistiendo por medio de una serie de crónicas sobre este episodio, denominadas en términos generales "El Relato de un Náufrago" que causaron gran controversia y el Comando de la Armada se vio obligado a intervenir pues consideró que en algunas partes se había deformado la verdad.  Sin embargo, en la investigación interna llevada a cabo por la Armada, se aclararon todos los aspectos administrativos, técnicos y de Comando.  Estas crónicas, a la larga, lo que sirvieron fue para despertar la conciencia marítima de un país a espaldas del mar que con frecuencia es cruel para los buques y los hombres; el autor, con envidiable estilo, trasladó diariamente a miles de colombianos a vivir la increíble hazaña de un marinero bogotano, único tripulante náufrago de un destructor perteneciente a la Armada Nacional, casi desconocida en las ciudades y pueblos del interior.  Lo que sí se notó al final, fue que la modernización del "Caldas" afectó sus características marineras y lo dejó más celoso.

 

*El Incidente del "Antioquia" y el Final de los Destructores. El segundo incidente lo sufrió el "Antioquia".  Este y el "Caldas" habían viajado en septiembre de 1956 a la Base Naval de Norfolk, Virginia, E.U. con el fin de participar en el entrenamiento y maniobras conjuntas con buques de la USN basados en dicho puerto.  Durante el viaje de Colombia a los E.U. el "Antioquia" sufrió varios problemas técnicos y por tal motivo fue sometido a una pormenorizada inspección en la Base mencionada.  A pesar de esto, participó en los ejercicios que comenzaron en octubre con la situación anunciada que la Fuerza de Tarea Conjunta debió afrontar vientos muy fuertes causados por el coletazo del huracán Flossie y por tal motivo el "Antioquia", debió regresar a la Base, pero en este viaje tuvo graves problemas de gobierno y la proa mostró tendencia a sumergirse.  Con mucha dificultad arribó a Norfolk, después de soportar 24 horas de emergencia, y allí recibió al poco tiempo el reporte de la inspección que no alcanzó a conocer antes de las maniobras, el cual decía: "Estos buques (refiriéndose al "Caldas" y "Antioquia") han sido estructurados transversalmente, y con la falla del casco y de las cuadernas, se hallan en grave peligro de perder la popa en caso de encontrar oleaje muy severo".  Conocido por el Alto Mando este informe y teniendo en cuenta el récord de fallas de los dos nobles destructores que fueron la espina dorsal de la actual Armada, se consideró que las reparaciones recomendadas resultaban a todas luces antieconómicas, dada la edad de los buques (25 años) y el gobierno tomó la decisión de retirarlos del servicio en los primeros meses de 1961.

 

Percance del “Caldas” por el Vicealmirante Eduardo Wills Olaya

En el escrito atrás mencionado el señor Vicealmirante Eduardo Wills, ya fallecido, asegura que finalizadas las reparaciones del Destructor en Mobile, Alabama, la Unidad “pasó todas las pruebas requeridas para verificación de los trabajos y las necesarias sobre estabilidad, con resultados satisfactorios.  Antes de zarpar se comprobó el cargue y estiba de acuerdo con curvas de estabilidad determinadas para el buque”. 

Confirma el señor Almirante en su relato que el Comandante del Destructor Capitán de Fragata Jesús Valenzuela y el segundo Comandante, Teniente de Navío Jaime Barrera Larrarte, al afrontar en el Caribe el mal tiempo y la mar muy agitada, lo que se define como temporal, estuvieron en todo momento “en alerta sobre el puente de mando y habían recabado las precauciones de seguridad, todo lo cual fue registrado en el Libro de Ordenes del Comandante.  Se colocaron ‘líneas de vida’ con sus chicotes corredizos para uso del tránsito por cubierta.  Nada se dejó a la improvisación ni al azar”. 

Añade: “El ingeniero jefe, Capitán de Corbeta Eduardo Castañeda, comunicó la existencia de sólo 40 toneladas de combustible, pese a que se navegaba con turbinas de crucero para mayor economía [...]  El “Caldas” continuaba sorteando ola tras ola, hasta que una de ellas lo escoró a estribor y fue rematado por otra de mayor intensidad, que lo inclinó a más de 40 grados por lo cual se llegó a temer una fatal vuelta de campana...”.  

Entre los suboficiales entrevistados hace unos pocos meses por el capitán Martín, uno informa que en el momento de recibir la gigantesca ola: “el buque estaba ya con la chimenea casi horizontal...”; otro asegura que la escora “fue de 45 a 90 grados” y un tercero dice que “estaba 90 grados acostado sobre el mar”.  Como se ve, el temor y el paso inexorable del tiempo hacen ver las situaciones inverosímiles o peores de lo que en realidad fueron. 

Finaliza el señor Almirante Wills: una vez en puerto, “se efectuaron las investigaciones del caso y no se halló responsabilidad administrativa ni penal por parte del Comandante del Destructor en relación con el accidente [...].  La nave salvada por el acierto de su Comandante y la pericia de la tripulación, respondió estructuralmente gracias a su espléndida construcción.  En esta forma el infortunado accidente tuvo el carácter de caso fortuito ingobernable, y la salvación del tripulante, el de un hecho providencial”.  Sin embargo, el capitán Martín en su reciente recopilación de los hechos, asegura: “el capitán Chucho, Jesús Valenzuela fue condenado por “homicidio culposo”.  Como se puede observar, aflora la contradicción.

Se da por sentado que el señor Almirante Wills, brillante oficial, marino y comandante sobresaliente, así como gran conocedor de los viejos destructores “Caldas” y “Antioquia”, escribió en la Historia de las Fuerzas Militares con conocimiento de causa y apoyado en los documentos que menciona y por tanto se puede considerar su escrito como un documento de mucha validez histórica que refuta muchas de las versiones que se han tejido sobre el caso.

Coincidencia o no, casi cuatro meses después del accidente, el Comando de la Armada publicó con fecha 23 de junio de 1955 la “Ordenanza de la Armada” que “Tiene por objeto puntualizar las normas de procedimiento y los deberes fundamentales de los miembros de la Armada, con el fin de que, conociendo cada cual sus atribuciones y prerrogativas, el servicio se desenvuelva armónicamente, sin desorientaciones que afecten la disciplina y eficiencia de la Armada Nacional”.

Lo anterior significa que no quedarían más cabos sueltos en los procedimientos de la ARC como por ejemplo, en el Capítulo III, numeral 0312 dice: “Recomendaciones concernientes a los diseños y reparaciones.  Sin la autorización del Comandante de la Armada no puede hacerse cambio alguno en el diseño, modificación o reparación de buques, embarcaciones o en las instalaciones terrestres cuando éstos se aparten o difieran en materia substancial, de una decisión o fallo del Comando de la Armada.  El Asesor Técnico Naval que recomiende tal cambio debe hacer caer en cuenta al Comandante de la Armada de lo siguiente:

a.                  La decisión previa o fallo del Comando de la Armada en relación al asunto de la referencia.

b.                  Las razones para recomendar un cambio del fallo anterior o de la doctrina en vigor”.

 

En el Capítulo VII, numerales 0736 “Preparativos para hacerse a la mar después de declarar un buque en servicio activo y 0738 Pruebas y datos tácticos para buques recientemente armados”, se dan instrucciones precisas para efectuar los ensayos de maquinaria, equipos y material, antes de zarpar en un viaje largo.

Entonces, las preguntas que hoy afloran son: ¿Sucedió el accidente porque no existían políticas claras antes de la modernización y reparaciones de los destructores?  ¿Antes de publicar la Ordenanza se habían impartido instrucciones tan claras para hacerse a la mar después de declararse el buque en servicio activo?  ¿Los comandantes del “Caldas” y el “Antioquia” tenían instrucciones claras para efectuar todas las pruebas vitales y datos tácticos que se contemplan en la Ordenanza?  ¿Eran idóneos los Asesores Técnicos Navales colombianos y los ingenieros del astillero para autorizar el zarpe al término de las reparaciones?  Estas y otras son las dudas que hoy continúan flotando después del accidente.

 

La Versión de Gabriel García Márquez  -Gabo-

Después de tantos años, en 2002, Gabo en su libro “Vivir para Contarla”, atrás mencionado, revive el accidente del “Caldas” y su “Relato del Náufrago”, cuyo protagonista fue el marinero Velasco a quien volvió famoso.  En el primer libro nombrado narra los avatares para producir la “chiva” del buque y consigna sus propias conclusiones, enlodando de paso a la Armada. 

En lo que sí tiene razón Gabo es en su máxima antes del texto: “La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda y cómo la recuerda para contarla”.  Se supone que así como el escritor tuvo en cuenta este aforismo en sus reportajes, todos los que escribimos sobre el accidente debemos pensar también en ello.  Con el paso de los años los recuerdos son cada vez más borrosos, puesto que la memoria es frágil y se van esfumando los detalles de situaciones y sucesos, lo que impide que seamos completamente veraces por más que estrujemos el cerebro. 

La interpretación del Premio Nóbel sobre el desastre del “Caldas” y las frases que siguen entre comillas, se han tomado del libro citado.  Su versión de los hechos generó muchos roces con el Comando de la Armada y según éste: “No se tuvo inconveniente alguno en llegar al folletín de cronistas neófitos en la materia, plagado de palabras y conceptos antitécnicos e ilógicos puestos en boca del afortunado y meritorio marinero que valerosamente salvó su vida”. 

Apenas la prensa publicó las frescas noticias originadas en el primer Boletín de la Armada al respecto, empezaron a revolotear los periodistas para enriquecer la “chiva” y se alborotó el cotarro una vez la Marina anunció la milagrosa aparición del náufrago Luís Alejandro Velasco.  El más astuto entre todos los periodistas fue Gabo quien, con el apoyo de su jefe Guillermo Cano de El Espectador, acapararía los días siguientes la atención de un público ansioso por oír noticias causadas en un mar lejano del que poco habían oído hablar los colombianos. 

Así, pues, Gabo usó todos los recursos para el “que podía ser el reportaje del año si lográbamos tenerlo a solas, así fuera por media hora” dijo refiriéndose a Velasco.  En una entrevista furtiva que concedió éste al reportero Lácides Orozco de El Espectador en Cartagena“, que no pudo llegar a donde queríamos para saber cómo fue que un golpe de viento pudo causar semejante desastre con 7 muertos”, preocupó mucho a Gabo quien se propuso a aclarar el misterio. 

Sin poder tener contacto con Velasco, el periodista aumentaba su desazón con las entrevistas por radio autorizadas al náufrago “que le patrocinaban toda clase de perversiones publicitarias”.  Por ejemplo, recibió US $500 y un reloj nuevo por decir que el que llevaba puesto cuando cayó al mar soportó todos los rigores de la aventura y la fábrica de los tennis que tenía puestos le obsequió US $1000 por afirmar que sus zapatos eran tan resistentes que no se los pudo comer... 

Ante la insistencia de Guillermo Cano, logró al fin una entrevista de Velasco con Gabo y éste dice al respecto: “La empecé con un poco de mala fe tratando de que el náufrago cayera en contradicciones para descubrir sus verdades encubiertas...”.  Es decir, empleó las técnicas del inquisidor Torquemada, para ver si lo condenaba. 

Como el escritor quería encontrar la verdadera causa del desastre causado por una “tormenta”, Velasco le contestó: “El problema es que no hubo tormenta... lo que hubo fue unas veinte horas de vientos duros, propios de la región en aquella época del año...” y añadió: “La tripulación había recibido el pago de varios sueldos atrasados antes de zarpar y se lo gastaron en toda clase de aparatos domésticos para llevarlos a casa... rebasaron los espacios interiores del barco y amarraron en cubierta las cajas más grandes: neveras, lavadoras eléctricas, estufas.  Una carga prohibida en un barco de guerra, y en una cantidad que ocupó espacios vitales de la cubierta”. 

Concluye Gabo: “De modo que la causa mayor del accidente no fue una tormenta, como habían insistido las fuentes oficiales desde el primer día, si no que Velasco declaró en su reportaje: la sobrecarga de aparatos domésticos mal estibados en la cubierta de una nave de guerra”. 

Hasta aquí, hago un paréntesis para aclarar las conclusiones de García Márquez de acuerdo con lo dicho por el marinero Velasco.  En primer lugar, una de las causas importantes del accidente fue la tormenta, aunque la Armada menciona en su comunicado inicial la palabra temporal, definida por el Diccionario Marítimo. Editorial Juventud, Barcelona 1983, así: “Tormenta o perturbación que ocasiona la violencia del viento en las aguas del mar”.  No importa que Gabo diga: “unos vientos apenas más fuertes que los anunciados convulsionaron el mar bajo un sol espléndido, hicieron escorar la nave mucho más de lo previsto y rompieron las amarras de la carga mal estibada”.

En segundo lugar, el escritor no estaba a bordo y el marinero Velasco no era meteorólogo para afirmar si hubo o no temporal.  En tercer lugar, lo de las compras de los tripulantes no era carga prohibida, o de contrabando como aseguraron García Márquez y otros periodistas.  Si mal no recuerdo después de tanto tiempo, la ley 92 de 1948, reglamentada por la Directiva 002 del Comando de la Armada, autorizaba a los tripulantes de los buques de la ARC las compras de electrodomésticos en el exterior para uso en sus hogares, previo permiso del Comandante de Fuerza y la declaración escrita de cada compra en formato oficial, cuyo original se remitía a la Aduana.  El error consistió en estibar sobre cubierta varias cajas de elementos personales que no cupieron en las bodegas del destructor, pero esto no afectó la estabilidad del buque.

Recordemos que el Almirante Wills fue enfático en afirmar que antes de zarpar el “Caldas” se comprobaron todas las normas sobre cargue, estiba y estabilidad.  No se puede negar la superioridad en el uso de la palabra escrita por parte de nuestro premio Nóbel, pero es claro que éste no domina las condiciones de estabilidad de una nave y además no fue testigo presencial del accidente para emitir conceptos técnicos que le fueron transmitidos por el marinero Velasco, quien tampoco era experto en materias navales.  García Márquez no es historiador y lo que escribió sobre el accidente fue una novela, o sea: “Obra literaria en prosa en la que se narra una acción fingida en todo o en parte...”, según el DRAE.

 

Testimonios. Veamos lo que dicen algunos testigos que vivieron la desventura, tales como los tripulantes entrevistados por el capitán Martín en el año 2004, quienes en su mayoría aseguran que la carga pesada se estibó en las bodegas y bajos fondos para aumentar la estabilidad.  Sin embargo, el capitán de corbeta Fabio Rueda Gómez quien estaba a bordo, manifiesta enfáticamente que en las reparaciones modificaron “por completo toda la estructura del buque, la estabilidad, el centro de gravedad [...] el buque durante su travesía no fue lastrado y ya cuando entrábamos a Cartagena, estábamos prácticamente sin agua y sin combustible; por consiguiente el centro de gravedad estaba muy alto y el metacentro se había bajado, entonces era lógico que el buque con cualquier ola se tenía que voltear; esas fueron las causas del accidente”.  Siendo así, dónde estará la verdad?

Continúa Gabo con su versión de que algunas balsas no tenían la dotación de víveres, agua potable, remos y demás provisiones, por lo cual el náufrago padeció grandes angustias.  Al respecto dice el escritor: “Por los relatos de Velasco, parece que la suya (su balsa) era una de las que no tenía recursos”.  Y sugiere que otras balsas que la ola arrancó, no pudieron ser utilizadas por los demás náufragos.  Sobre este punto se tejieron muchas versiones y quedaron flotando otras tantas dudas.

Casi cincuenta años después, el capitán de corbeta Holmes Otero Reyes quien durante el accidente se desempeñaba en el “Caldas”, recuerda: “A mí como oficial de comunicaciones me correspondió recibir los víveres de mar y los tanques de agua para las balsas... y las ajustamos en cada una [...] de acuerdo con las normas [...]  Yo por eso nunca he creído que Velasco haya vivido cogiendo pajaritos y comiendo pescaditos y otras vainas [...] ahí abajo en la balsa había víveres que él podía sacar...”.  Pero, por otra parte, el contramaestre Santiago Macaisa Payares también a bordo del “Caldas” durante el episodio, afirma: “esa balsa (la de Velasco) no traía nada porque yo era de cubierta y a esa balsa no la tocamos”.  Además, la única balsa arrancada por la ola fue la de Velasco.  Estas son algunas de las muchas contradicciones que hoy afloran, cuando ya nada puede hacerse.

Finalmente, Gabo termina hablando de amenazas supuestas o verídicas, como la de “un hombre maduro y apuesto, con un precioso abrigo de pelo de camello y con sombrero de melón” quien, acompañado de “una mujer muy bella, tan bien vestida como él, y un amigo no menos impecable”, lo siguieron una noche tres cuadras, lo alcanzaron y el hombre bien plantado “le dijo que no podía estar de acuerdo con el reportaje del náufrago porque le hacía el juego directo al comunismo”.  Personajes y situación parecen sacados de las novelas policíacas de Sherlock Holmes, creadas por Conan Doyle.  Y continúa Gabo: “Fue el primero de una serie de incidentes que nos pusieron a pensar en serio sobre los riesgos de la calle” y remata: “Desde el relato del náufrago me habían aconsejado que permaneciera un tiempo fuera de Colombia mientras se aliviaba la situación por las amenazas de muerte, reales o ficticias que nos llegaban por diversos medios”.

Como todos los roces por los escritos de Gabo sobre el náufrago sucedieron con miembros de la Armada, a tal punto que la Oficina de Información y Prensa durante el gobierno del General Rojas Pinilla censuró los últimos relatos a petición de la Marina, se supone que el Nóbel pensara que las intimidaciones recibidas procedían de los marinos.  Afortunadamente en estos últimos cincuenta años, los integrantes de la Armada han demostrado, como siempre lo han hecho, que no tienen intenciones aviesas sino, por el contrario, son rectos y nobles.  Por lo tanto el gran escritor puede estar tranquilo pues sus perseguidores no pertenecían a la ARC.

Quince años después de la famosa serie de El Espectador, se publicó en España el libro titulado “Relato de un Náufrago” que se vendió como pan caliente, por lo cual decidieron publicar nuevas ediciones en alemán, inglés y otros idiomas.  En su prólogo García Márquez expresó: “Hay libros que no son de quien los escribe sino de quien los sufre, y este es uno de ellos.  Los derechos de autor, en consecuencia, serán para quien los merece: el compatriota anónimo que debió padecer diez días sin comer ni beber en una balsa para que este libro fuera posible”.

Por lo tanto cedió los derechos de autor al marinero Velasco.  Este, no obstante, después de 14 años, se dejó convencer de su abogado de que los derechos de las ediciones en otros idiomas también le pertenecían por ley, “a sabiendas de que no eran suyos, sino por una decisión mía (de Gabo) en homenaje a su heroísmo, su talento de narrador y su amistad”.  Por lo tanto, dio la orden a la editorial en España de no seguir pagando los derechos a Velasco, hasta que la justicia decidiera.

En 1993, finalmente el juez decidió que el único autor de la obra era García Márquez y éste dio los derechos de autor a una fundación docente.  Velasco murió reclamando sus derechos de autor, el 2 de agosto de 2000 a causa de un agudo cáncer de pulmón y dice la prensa que fue enterrado como un héroe (Semana. Edición 953 de 2000. P 44).  Su última voluntad fue que lanzaran sus cenizas al mar Caribe que hace cincuenta años logró vencer con su increíble resistencia física.  Dios lo tenga en su seno.

 

EPILOGO

No queda otro consuelo que aceptar la hipótesis del Maestro Germán Arciniégas sobre la realidad y la ficción, cuando dijo: “Aunque parezca de otra manera, no es sencillo trazar deslinde entre novela e historia.  Saber hasta dónde la verdad se encuentra en los libros de historia, y hasta dónde la novela es pura invención, son cosas de difícil esclarecimiento”.  Por lo dicho, sigue viva la polémica!


RECUERDOS Y ANÉCDOTAS DE "MINCHO" HERRERA
Capitán de Navío
David Salas Prieto CN 15-018

En búsqueda de anécdotas y episodios de la “old navy” que recuerden nuestra niñez, quiero mencionar una especial del Señor Capitán de Fragata-Bacteriólogo LUÍS EDUARDO HERRERA GALINDO, mas conocido como el “Mincho Herrera”. Eduardo, fue uno de los pioneros en Colombia en la aplicación de factor Rh. Para su tesis de grado desarrollada en el viejo Hospital Naval, encima de las murallas de Cartagena, contiguo a las instalaciones de la Infantería de Marina, hoy  Museo Naval, importó un ejemplar “macaco rhesus”, (originario de India y China) quien además de soportar los pinchazos del Doctor Herrera y su reclusión, desarrollo un divertido y simpático estilo de vida (la del macaco), pues conocedor del menú naval (rico en banano) para los convalecientes operados e impedidos de moverse, aprovechaba la ausencia de acompañantes para irrumpir intempestivamente en el camarote , con enorme y poco grato gesto dental de afilados colmillos armonizados  con sonoros aullidos de combate y amenazadores y desproporcionados peludos brazos. El susto era fenomenal!... sobre todo por el ataque frontal!.... el cual terminaba en el plato que contenía el banano... y una vez conquistado el tropical trofeo, se escapaba veloz como un rayo y solo después de unos interminables segundos se daba cuenta el paciente que era necesario respirar si quería contar el cuento. Personalmente fui testigo de mas de una incursión y confieso que la experiencia no fue grata, pero gracias a ese bicho, el Doctor Herrera empezó a clasificar por primera vez, con su respectivo grupo sanguíneo,  a cada uno de los oficiales del curso # 1 en adelante. Del cuadrumano, muchos cartageneros lo conocieron pues a veces alternaba su estadía en el Hospital Naval, con unas escapaditas, para no olvidar sus ancestros, y disfrutar de un ambiental paseo entre los árboles del parque de Bolívar. Falta aclarar quién y cómo capturaban al catirrino  para devolverlo a su jaula. 
El Señor CF. Eduardo Herrera Galindo, fue condecorado con la Medalla General Rafael Reyes y el siguiente escrito fue su testimonio y agradecimiento:ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE OFICIALES RETIRADOS DE LAS FUERZAS MILITARES (ACORE).  38 AÑOS DE ANIVERSARIO. CONDECORACIÓN MEDALLA GENERAL RAFAEL REYES. 50 AÑOS. AL SEÑOR CAPITÁN DE FRAGATA (r) LUÍS EDUARDO HERRERA GALINDO. NOVIEMBRE 27 DE 1998.
 
“Mi afecto por la armas de la República data de mis propias vivencias familiares ya que en lo Naval, un primo hermano de mi madre, el Señor Capitán de Fragata Luís María Galindo fue uno de sus fundadores con el primer grupo de aspirantes a Cadetes Navales que el General Rafael Reyes envió a España; prestó luego sus servicios durante la guerra con el Perú y fue Comandante de la recién fundada Base Naval de Cartagena y alentó a mi hermano el Sr. Capitán de Corbeta Alejando Herrera Galindo, para hacer parte del primer contingente de Cadetes Navales de la Escuela Naval. En el Ejército, el Sr. Coronel Hernando Herrera Galindo que fue Director de la Escuela Militar de Cadetes y de la Escuela Superior de Guerra. En la Aviación Militar, el Sr. Teniente Guillermo Herrera Galindo, muerte en accidente aéreo, en servicio.

Tuve así por esta inclinación afectuosa el privilegio de ingresar a la Armada, pudiéramos decir que en sus albores cuando los únicos Almirantes que para ese entonces teníamos eran los Almirantes José Prudencio Padilla y Felipe Luís Brión, héroes de nuestra independencia.

Fui testigo de su desarrollo hasta verla ahora pujante y plena de episodios que la han engrandecido a través de sus sucesivos Comandantes que han puesto sus capacidades e inteligencia para mantenerla en esa tradición marinera de ser Caballeros del Mar, en quienes la honestidad, gallardía y señorío siguen siendo la constante, como lo exalta nuestro himno marinero.

Cuando pisé por vez primera la planta del Hospital Naval Esguerra López construido sobre las murallas y ya desaparecido, no existía el Laboratorio Clínico. Yo acababa de recibirme como Bacteriólogo, egresado de la Universidad Nacional Facultad de Medicina en Santafé de Bogotá y tuve el honor de ser su fundador. Me correspondió desempacar todo el material de laboratorio clínico que los E.E.U.U. nos cedieron.

Mi tesis de grado El Factor Rh en las transfusiones sanguíneas, dedicada a la Armada, la escribí motivado por el reciente descubrimiento de ése factor que hizo posible la explicación de la eritroblastosis fetal y fue factor determinante en la realización compatible de las transfusiones sanguíneas, pudiendo llevar su beneficio a nuestro Hospital Naval, siendo el primer banco de sangre citratada en Cartagena, también llevamos este beneficio a la  Casa del Niño por solicitud del inolvidable doctor Napoleón Franco Pareja y fundamos el banco de sangre del Hospital San Pablo, siendo su director el Dr. Miguel Berdugo, ya fallecido.

Sea ésta la oportunidad de recordar con mi eterna gratitud a mis jefes, compañeros, profesionales civiles y personal de Sanidad Naval de Cartagena, que durante mi permanencia en la Armada gestaron el desarrollo de nuestra Sanidad y pusieron los cimientos para que ella pudiera llegar a donde está, lamentando no poder nombrarlos porque sería prolijo enumerarlos, citando tan solo a mis jefes inmediatos, Capitanes Víctor Eusebio Rodríguez Acosta y Jacinto Rueda Gómez, Directores de Sanidad Naval en Cartagena, Antonio María Martínez Escobar, Ariel Díaz Echeverri u Enrique Torres Merlano, Directores del Hospital Naval, ya fallecidos., haciendo énfasis en que dejaron en mi el recuerdo imborrable de profesionalismo y esfuerzo de superación que aún subsiste entre quienes ahora lo conforman y dirigen.

Finalmente quiero dar las gracias por esta distinción al Señor Contralmirante Juan Pablo Rairán, Presidente Nacional Acore, al Consejo de la Medalla Rafael Reyes, al Sr. Capitán de Corbeta Fabio Rueda Gómez Presidente Seccional Acore Bolívar, al Sr. Vicepresidente Capitán de Navío Ramiro Tenorio Tuirán, a la Junta Directiva de nuestra Seccional y a todos ustedes que con su presencia engalanan esta celebración” CF Eduardo Herrera G.

Foto del Dr. Herrera y su esposa Alicia Sáenz de Herrera (q.e.p.d).


CRECE... CRECE... LA CYBER-AUDIENCIA
14-011/ EVELIO TROCHEZ OCHOA  -CC-
15-002/ MARIO BOTERO JARAMILLO -CF-
29- / GERMAN CASTRO MALDONADO -CALM-
30-041/ JAIME SÁNCHEZ RODRÍGUEZ -CN-
36-071/ CARLOS ALBERTO VILA  LOZANO -TF-
39-129/ JAIME E. CRUZ
40-122/ HUMBERTO BARATTO
45-009/ JOSÉ IGNACIO CASTELBLANCO ROBAYO -Cap. Altura-
50-007/ JOHNNY DÍAZ URIBE -CN-
74-076/ FERNANDO ALONSO TABARES MOLINA
81-026/ RAFAEL H. GÓMEZ GÓMEZ -CF-
100-030/ NORMAN IVAN CABRERA MARTINEZ  -TN-
IM 38-036/ ALVARO RICO HERNÁNDEZ  -CR IM-
IM-15-031/ JOSÉ LEONIDAS MUÑOZ -CR IM-
MC 29-012/ FRANCISCO J. GÓMEZ
15 nuevos Cyber- suscriptores
 
Número de cyber-suscriptores a la fecha:  931

 

ZAFARRANCHO GRAFICO


DESDE NEW ORLEANS HIP..HIP..
 
Enfermero Pinto:
Lastima que aquí no podamos decir: Ueepajeeeeee!!! pero, igual gozamos el carnaval. Desde New Orleans --Bourbon St.-- en el MARDI GRAS, un saludo para los contis cyber-correderos.
Javier Betancourt Cyber-corredero 69-010

RUMBA DE LOS AÑOS 60
En la casa de Jorge Serpa CN 38-082, se dieron cita un grupo de amigos para reír, cantar, comer, beber y trasnochar. El CF Ernesto Cajiao CN 35-007, con sus cuentos y chistes alternó con el famoso cantante Paulus Gallinazo, autor de "Una flor para mascar".  Ellos fueron la delicia de una noche que terminó la mañana del día siguiente.
El CF Ernesto Cajiao en medio del CC RN- Ingeniero Javier Restrepo y el CR IM Ignacio Ochoa, cuando imitaba a una hermana de la caridad 

 
Paulus Gallinazo recitando un poema "Nadaísta", mientras su vecino el Valm Guillermo Barrera, está en el baño.
El Mono Ochoa "recuperado"

La TF-RN- Martha Patricia Pacheco, el mono Carlos Prieto CN 34-034,  su esposa Carmenza Vargas y Gladys Ardila de Serpa

OBITUARIOS

TN CARLOS TORO URIBE

Mis respetos a la familia del Teniente de Navío Carlos E. Toro Uribe de quien fui su segundo comandante a bordo del ARC Gorgona por allá en los inicios de 1956. Guardo gratos recuerdos desde que lo conocí cuando éramos cadetes de la Escuela Naval. A sus deudos y compañeros de promoción   les envió con Maria Teresa mi señora, los sentimientos de pesar.
Alm. Manuel F. Avendaño Galvis. 
Nuestra mas sentida manifestación de condolencia para Amelia y sus hijos
Pedro J Gutiérrez CN 21-071, Sra. e hija
OFICIAL MERCANTE JAIR RIVERA VALENCIA

La familia Jaramillo Herrera deplora el sensible fallecimiento de Jair Rivera quien en cumplimiento de sus compromisos de trabajo ofrendo su vida a la causa y al mar. Ruega al Todopoderoso para que derrame bendiciones y reconforte espiritual y anímicamente  a su familia en estos difíciles momentos. Abrazos condolencia.
Vicealmirante(r) Jaime Jaramillo, señora e hijas
OFICIAL MERCANTE GONZALO VANEGAS

Deploramos sensible fallecimiento del colega marino Capitán Mercante Gonzalo Vanegas. Que Dios Todopoderoso lo guarde en su santo reino. Abrazos condolencia.
Vicealmirante (r) Jaime Jaramillo y familia.
NOTA: Preocupa dos muertes en accidentes en el lapso de tres días, con los capitanes Jair Rivera y Gonzalo Vanegas. Que bueno sería que Dimar investigara lo que esta pasando a su gente de mar y naves.

CEDENETA... PUNTO... CADENETA...
Cyber-chisme al servicio de la información naval
INSTALACIÓN EN CARTAGENA DEL CONSEJO DE HISTORIA NAVAL
El próximo jueves 24 de febrero se instalará formalmente en Cartagena el Consejo de Historia Naval Colombiano, con asistencia del señor Almirante Mauricio Soto Gómez, Comandante de la Armada Nacional. Para tan significativa sesión viajarán los miembros del Consejo, Vicealmirante Carlos Ospina Cubillos CN 21-065 (Presidente); Economista MBA Jorge Serpa Erazo CN 38-082 (Vicepresidente); Contralmirante Luís Carlos Jaramillo Peña CN 21-070; Almirante Alvaro Campos CN 24-008 y los Capitanes de Navío  Jesús Enrique Caro CN 31-009, Ricardo García Bernal CN 34-030 y Carlos Prieto Ávila CN 34-034.
Además de los actos académicos, se presentará a la comunidad naval de la Heroica, un interesante video sobre la Batalla de Trafalgar que, este año, conmemorará 200 años, para lo cual el buque escuela "ARC Gloria" estará presente.     

NUEVO INGENIERO DE SISTEMAS
David Velandia Muñoz, propietario de Nikimicolombia, empresa de sistemas cuyo servidor es utilizado por Cyber-corredera para el envío y recepción de mensajes vía internet, obtuvo en días pasados el título de Ingeniero de Sistemas de Newport International University, prestigiosa universidad norteamericana. Felicitamos a nuestro joven patrocinador, quien ya tiene importante prestigio y reconocida experiencia en el área de sistemas, por este importante logro y enviamos a sus padres Capitán de Navío Sigifredo Velandia y a su distinguida esposa, la doctora Vilma Muñoz de Velandia, un resonante aplauso de congratulación.

NUEVO MEDICO
El joven Iván Ramiro Tenorio Barragán recibió el pasado jueves, el título de Doctor en Medicina  de la Universidad El Bosque. El nuevo médico es hijo del Capitán de Navío Ramiro Tenorio Tuirán y Graciela Barragán de Tenorio. Felicitaciones al nuevo profesional y a su distinguida familia.

EL "ROJO" OCHOA EN EL MERCADO
Es muy grato informar a la Familia Naval sobre la recuperación anímica de nuestro apreciado y muy querido amigo el CR IM Ignacio Ochoa CN 37-037, luego de superar el duelo familiar que llegó a conmover y preocupar a familiares, amigos y allegados. El Mono Ochoa ahora se encuentra dedicado a practicar golf, pero algunos cyber-reporteros muy "comunicativos" (que desean mantener su anonimato), han reportado que el apreciado Coronel está incursionando con envidiable éxito en el "mercado" del amor. En algunas reuniones sociales, salas de cine y restaurantes lo han visto acompañado de hermosas, elegantes y distinguidas damas. Apoyamos al Mono Ochoa en su rehabilitación anímica y tratamos de atenuar nuestra envidia con un B Z.
MISA EN CARTAGENA POR LOS CAÍDOS 
En pasados días, el CFNC invitó a la comunidad naval de Cartagena a una misa que se ofició en la iglesia de San Pedro Claver, por los miembros de la Armada caídos en acción en las últimas semanas. El acto religioso estuvo muy concurrido.

MATRIMONIO
En la Iglesia de Santa Bibiana, el pasado 12 de febrero, contrajeron matrimonio María del Pilar García Iriarte y Gustavo Adolfo Pinzón Cuellar, hijos del Capitán de Navío Ricardo García Bernal "El pollo" y Myriam Iriarte de García y de Gustavo Pinzón y Elsy Cuellar de Pinzón, respectivamente. Luego de la ceremonia religiosa los padres de la novia ofrecieron una elegante recepción en el museo El Chicó. Cyber-corredera envía felicitaciones a la nueva pareja.    

CUMPLEAÑOS DEL MONO PRIETO
Entre exquisitas viandas y abundante licor, Carmencita Vargas de Prieto le celebró con un grupo de amigos y compañeros, en un elegante restaurante de Usaquén el cumpleaños a su esposo quien lucía como si estuviera cumpliendo 30. Felicitaciones al Mono, reikista e historiador quien no ha terminado aún su luna de miel.    

EL CASO "CHENGUE" EN TELEVISION
Por el Canal Capital, en el programa "Versión Libre", se transmitieron en dos sesiones las aclaraciones del BG IM Rodrigo Quiñones CN 45-034 y del TC IM Oscar Saavedra  IM 16-042.

CAPITÁN  OTERO ERAZO RELATA SOBRE "EL KARINA"
El Capitán de Navío Eduardo Otero Erazo CN 39-026, en impresionante e interesante reportaje concedido al Pañol de la Historia, relató como protagonista, el único enfrentamiento naval que ha tenido la marina de guerra colombiana y que él, como comandante del ARC Sebastián de Belalcazar, el 14 de noviembre de 1981, en el Océano Pacífico se enfrentó con un buque que transportaba armas  y municiones para el grupo guerrillero M-19. Este importante relato será editado en un próximo Pañol de la Historia.    

           CYBER-CORREO DE LA LULÚ


FELICITACIONES A "PALA" SUPER PESADA

Apreciados Cyber-correderos:

Tengo el placer de informarles que el pasado 2 de Febrero, el Sr. Alm. Jaime Eraso Annexi CN 01-010, cumplió 89 años, aniversario que fue celebrado en una reunión familiar en Miami. Es asombrosa la condición física del Sr. Almirante Eraso, pero lo que más llama la atención es cuando relata los episodios de su vida, con detalles y precisión cronológica asombrosa, algunos de ellos, soportados por alguna foto o documento. Entre otras cosas, es importante anotar  que la pérdida de su valioso archivo personal ocurrió, cuando le tocó abandonarlos al salir de Cuba, al inicio de la revolución castrista.

El Sr. Alm Eraso tiene en el Pañol del Contramaestre el siguiente inventario: cinco hijos,  ocho nietos y 4 bisnietos. Todos los cinco hijos han pasado ya la línea ecuatorial de la vida. Por este medio quiero felicitar al Sr. Almirante, con mis mejores deseos y augurios para el y su familia.

Jairo Quiñones Sánchez CN 38-080

Cyber-corresponsal en Miami


TO RAMÓN ARIZA FROM JORGE PINEDA
Ramón, como todos los meses soy un asiduo lector de nuestra corredera virtual, que lindo mensaje el que tu enviaste, pues de verdad seremos marinos hasta que Dios quiera, y esa linda reflexión también la siento como mía pues la gloriosa Armada Nacional será parte de mi vida por siempre, que alegría saber de ti y que como casi todos los que tuvimos el honor de pertenecer a la Armada Nacional, nos hemos convertido en gente de bien para grandeza de nuestra Patria, cordial saludo
CF Jorge Pineda Gallo CN 42-109.

PRESENTACIÓN NUEVO CYBER-CORREDERO
Saludo cordial. Me permito presentar al señor CFEIN Rafael Humberto Gómez Gómez, NA 81026, quien actualmente se desempeña como Jefe del Departamento de Servicios Generales de la Base Naval ARC "BOLÍVAR", en Cartagena, y desea recibir la Cyber-corredera. 
Cordialmente,
CF Sergio Uribe C.  CN 82-122

SOLICITA CYBER-CONTACTO 
Para mis compañeros y amigos de la Armada Colombiana:
Soy Jaime Cruz de el contingente 39. Ahora vivo en Palm Beach, Florida. Mi esposa es Amalia Maria y tenemos un niño de 7 años, James. Quisiera contactarme con mis compañeros y amigos en Colombia o el extranjero. Por favor escríbame a jcmaloka@aol.com.
Tengo aproximadamente 26 anos viviendo en USA. Recientemente estuve en Cartagena, Noviembre 11 fue muy buena experiencia visitar el lugar que nos dio tanto en la vida y nos trae tantos recuerdos gratos de nuestra juventud. Me gustaría contactarme con todos Uds. para mantener una comunicación mas frecuente. Visité a Carlos Wiesner y su esposa en Bogota. Viví 15 años en New York y  tuve contacto con German Enciso y su esposa. También con Jaime Arboleda.
Espero que alguien me conteste.
Jaime Cruz CN 39-129

INTERÉS POR REGISTRO
Con toda atención les manifiesto mi interés de ser registrado en la lista de destinatarios de LA CORREDERA 38. Igualmente aprovecho esta oportunidad para desearles muchos éxitos en el presente año y que el gran Dios de los mares permita que sugestión continúe contribuyendo a mantener unida la familia naval.
Cordialmente
CN Johnny Díaz Uribe CN 50-007

DEL SEÑOR COMANDANTE DE IM

Enfermero Pinto:

Un cordial saludo extensivos a todos los cyber-correderos. En nombre del personal de la infantería de marina les deseo un feliz año 2005, y a todos nuestros compañeros de armas les deseo  bienestar y mucha prosperidad. De igual manera nos sentimos muy complacidos por la designación del alto mando naval al nombrar dos ilustres personas afectas a nuestra marina  para que recopilen y escriban nuestra historia. Desde el comando de infantería de marina estaremos prestos a servirles.

Cordial saludo.

Calm Luís Fernando Yance Villamil CN 47 099

Comandante infantería de Marina.


SAMPEDRO CON NUEVO E-MAIL
Enfermero Pinto:
Un cordial saludo para usted y todos los cybercorrederos en este 2005 y los mejores augurios. Le informo mi nuevo e-mail:
hsampedro@cable.net.co en el cual espero seguir recibiendo la marinera información a que nos tiene acostumbrados.
Héctor Sampedro Abad CN 33-040

OBLIGANTE RECOMENDACIÓN
Apreciado enfermero Pinto:
El Señor Capitán de Navío Jaime Sánchez Rodríguez (CN-30-041) e.mail: jaimeyolanda@hotmail.com, quien vive aquí en Cartagena, me ha manifestado su deseo de vincularse a Cibercorredera. Conocedor de la brillante trayectoria Naval, sus cualidades personales y el sobresaliente desempeño en los importantes cargos que ocupó el señor Capitán Sánchez durante su carrera, me permito recomendarlo para que haga parte del selecto grupo de "cibercorrederos".
Atentamente:
MG IM Octavio Gnecco Iglesias CN-29 020

CONTI EDUARDO GÓMEZ SE SIENTE ABANDONADO 
Apreciados señores:
Quiero desearles un feliz año 2005 pletórico de paz, esperanzas de logros en todas las áreas y felicidad con las familias, extensivo a toda la agrupación naval. Qué ha pasado con ustedes que no he vuelto a recibir sus interesantes y agradables correos?
Atentamente
Eduardo Gómez León CN 38-039
RETOMA CONTACTO
Apreciados Correderos:
Me entere de su existencia y me pareció muy interesante volver a tener noticias de la armada y su entorno. Como hijo de oficial naval que pasó parte de su infancia en Manzanillo y en diversas bases y estaciones de la armada y que posteriormente disfruto de las delicias de la escuela por allá en el año 81, sería muy placentero retomar contacto.
Cordialmente,
Eduardo Meléndez Ramírez CN 82-074

FELICITACIÓN Y ACLARACIÓN
Mi querido y recordado enfermero Pinto:
Felicitaciones a Jorge Serpa por la distinción otorgada por nuestra querida Armada Nacional, pues bien merecida la tiene por el abnegado y desinteresado manejo de este medio de comunicación que nos mantiene informados y tanto nos recuerda una parte importante de nuestras vidas.
Me permito aclararte que el informe en la ciber No.56 sobre los migrantes de Canadá a USA es del Capitán de Altura Carlos Gómez. No se porque aparece como del cadete Javier Betancourt. A propósito saludes a Carlitos y familia a quien deseamos éxitos en su nuevo trabajo.
Saludos marineros
Ángelo Bedoya MC 11-003

COLABORADOR DEFRAUDADO
Don Enfermero Pino;
Escribí un articulo hace un tiempo sobre el viaje que hicimos en el 70 "La vuelta al mundo". Me escribe ahora un compañero de ese tiempo, el es CN Mario Rubiano Groot y dice leyó el artículo y le encantó.
Mi pregunta? Yo no he podido leer nada, que será? A mi no me ha llegado nada, pero todos sus mensajes siempre me han llegado, hasta el de hace. Le agradecería mucho si pudiera mirar este asunto.
A su servicio
Ramón E Ariza CN 45-004
Nota de Cyber-corredera
Apreciado Conti Ariza: como le informamos directamente, los correos que atentamente le enviamos fueron devueltos por tener lleno su mailbox

LORO ABOGA POR GÓMEZ LEÓN
Enfermero Pinto: 
El conti Eduardo Gómez León,  CN 38-039 esta extrañado por que al parecer lo borraron de la lista del directorio electrónico de la corredera. Manifiesta nuestro conti  que en varias oportunidades ha enviado correos a la enfermería  sin obtener respuesta alguna.
Saludos,
Lorenzo Indaburu CN 38-010

PETUNIA PRESENTA A CHEO
Apreciado Enfermero:
Me permito presentar como nuevo suscriptor de nuestro informativo virtual al Señor Capitán de Altura  JOSÉ IGNACIO ASTELBLANCO ROBAYO, castelcheo@gmail.com, NE45-009, quien egreso de la Escuela Naval con el curso MC-19.
JOSÉ IGNACIO mÁs conocido como CHEO ha sido nuestro compañero y colega desde los tiempos de la FLOTA MERCANTE GRANCOLOMBIANA S.A.y estará muy complacido de recibir nuestra prestigiosa publicación
Saludos
Yesid Sarmiento V. CN 38-141  

PARA CARMENCITA DE SOTO
Carmencita
Las palabras del infante o de quien las escribe son las de un pueblo que quiere a su patria pero ve con tristeza que solo unos pocos son los que salen a defenderla. Tendremos patria grande cuando todos, al unísono enfrentemos a los enemigos de nuestra nación, cuantos todos sintamos y creamos que somos hijos de la misma patria, cuando todos sin esquinces salgamos en la defensa de nuestra libertad y de nuestros derechos. Que grande será Colombia cuando entienda que es tan Colombiano, un niño un joven un adulto o un viejo, del norte o del sur de Bogotá. Que grande será Colombia el día que nos duela la muerte de un ciudadano, sin importar que tan abultado sea su bolsillo o sus pingues abolengos.
Carmencita: Colombia y Dios te están agradecidos., BZ
Te admira y quiere,
Enrique Torres  Salamanca CN 38-020

GRILLITO III DESDE LOS EMIRATOS ÁRABES OFRECE CYBER-MASCOTA
Apreciado Enfermero PINTO
Un cordial saludo para usted y todo su equipo de colaboradores y felicitarlos por tan excelente labor que vienen realizando con mucho entusiasmo. Deseo solicitarles la inclusión de un nuevo socio al Sr.Capitán de Fragata (r) MARIO BOTERO JARAMILLO Contingente CN 15-002. Muchas gracias y acá como siempre a la orden y dispuesto a adoptar un camello como la mascota de la CYBER-CORREDERA
Luís Carlos Torres (El Grillito III) CN 64-091
CYBER-DECANO DE LA U. TADEO SIN NOVEDAD
Queridos correderos:
Aunque mi urdimbre de camellos, libros y campañas me impiden a veces poderles enviar un abrazo de oso a todos y todas las correderas, aquí doy parte por comienzo de franquicia sin novedad especial. días inolvidables en Manzanillo  vivo otra vez  cada vez que recibo la corredera, y puedo medir la velocidad de mis pensamientos en millas náuticas, y en sueños hechos realidad.
Para todos, van mis mejores deseos para este 2005  seguro de que no estarán "Al pairo" ninguno de ellos.
Christian Schrader Valencia CN 42-141

ZARPA PARA ALEMANIA
Febrero 4 del 05
Dando un cordial saludo deseo despedirme del alto mando militar NAVAL, de mis compañeros y todo el equipo que desde el año 2001 -en el Curso 6 de la Reserva guarnición Bogota hasta la fecha me han permitido compartir y aprender a querer mas a mis superiores y a este gran  país,-Colombia .
Próximamente viajo en compañía de mis 2 hijas y esposa para Alemania, pues Dios mediante inicio una Maestría  en Gestión y Explotación Aeronáutica por 2 años y posiblemente me quede por unos años en este país. Quiero agradecer todo lo que me han enseñado y han compartido conmigo. Gracias por todo. Ya tienen un compañero y amigo mas en Europa.
Atentamente,
Guillermo Fernando Roncancio Suárez. TF-RN- Curso 6 guarnición Bogotá

DESDE LOUSIANA
Enfermero Pinto:
Atraves de su conducto, me permito informarle a la familia naval que, desde el primero de febrero, estamos manejando la División Internacional de Coralmarine Services Inc. en la ciudad de Amelia, estado de Louisiana. Somos una empresa que presta apoyo a la industria petrolera que opera en el Golfo de México. Entre otras actividades hacemos: salvamento marítimo offshore, venta de equipos para la operación marítima y limpieza y desgacificacion de tanques de combustibles. Nos encuentran en el site: www.coralmarine.com y mi dirección electrónica, es: coralmarine_javier@yahoo.com, gracias por su comunicación y quedamos a la disposición de la industria marítima en Colombia.
Cordial y atento saludo,
Javier Betancourt CN 69-010

RECUMAR EN BOGOTA
Estimados Amigos :
Estaremos realizando en Bogota el Seminario Taller "Aplicación de la Norma API 653 para Inspección, reparación, alteración y reconstrucción de tanques de almacenamiento", los días 10, 11 y 12 de Marzo del 2005, en el Hotel Bogota Plaza.
Por favor ver en el anexo los detalles. No deje de contactarnos para aclarar cualquier inquietud.
Saludos,
Capitán Ricardo Izquierdo G.  MC 31-018
Gerente General Recursos Marítimos Ltda. - RECUMAR
Cartagena - Colombia

VILA  CYBER-SUSCRIPTOR
Apreciados señores y ex-compañeros:
He tenido noticia de la publicación que vienen haciendo todos los meses y desearía recibirla. Me retire a voluntad propia con fecha 1° de enero de 1.975 con el grado de Teniente de Fragata del cuerpo de Administración. Espero tener pronto noticias y agradezcoles de antemano la atención a la presente.
Carlos Alberto Vila Lozano  CN 36-071
CONTI QUINTERO ESTA MFP
Cordial saludo !!!, les agradezco me envíen la información subsiguiente al siguiente correo: chevro70a1@yahoo.com , donde estaré QAP a toda su maravillosa genialidad.
CN Hernando Quintero Santamaría  
Nota de Cyber-corredera
QAP fue cerrado por el Gobierno en 1996 y solo quedó CM& 

DESEA ESTAR ACTUALIZADO
La presente es para solicitarles sea tenido en cuenta en su correo para mantenerme actualizado de la familia naval
Gracias por su atención
CN Alvaro Antonio Rico Hernández IM 18 036

DESEOS CUMPLIDOS

Bogotá, 10 de febrero de 2005

Apreciado enfermero Pinto:

Tengo el agrado de enviarle el correo electrónico del Señor Contralmirante Germán Castro Maldonado del curso NAR-29, quien desea pertenecer al grupo de cybercorredera.

CN Luís Francisco Chacón Peña CN 43-007


CYBER-CONTACTO
De ser posible y através de su conducto, atentamente solicito las coordenadas del CALM Juan Rairan, CF Ernesto Cajiao y Cap de altura Yesid Sarmiento. Quiero contactarme con ellos. He visto que participan en la publicación, solo que no guardo las ediciones anteriores.
Saludo cordial,
Javier Betancourt CN 69-010

EX DIRECTOR DE LA CORREDERA EN 1997 DICE "HOLA"

Hola: Soy Teniente de Navío, contingente 100, fui director de la corredera en 1997 y me gustaría que me enviara la cibercorredera 

Muchas gracias

TNESP Cabrera Martínez Norman Iván CN 100-030


VALIOSA INFORMACIÓN PARA CAPITÁN BARATTO
Estimados Señores:
Solicito con toda atención ser inscrito en su directorio a fin de recibir la valiosa información que ustedes comparten.
CC Humberto Baratto Abello CN 40-122

Cyber-mascaron de Proa 

 

Cyber-corredera-

E-mail: lacorredera38@nikimicolombia.com

Suscripción gratuita. Derechos Reservados. 

Se invita a divulgar la información aquí contenida, citando la fuente.
Si usted no desea seguir recibiendo este informativo virtual, por favor infórmelo vía e-mail


NIKIMI COLOMBIA HS LTDA

PATROCINADORES DE CYBER-CORREDERA

Tiene el agrado de comunicar a los Cyber-correderos que próximamente, através de su tienda virtual podrán adquirir lo último en tecnología de punta desde cualquier parte del país. Este servicio llegará a ustedes vía Internet. 

Información: info@nikimicolombia.com